El aparcamiento del nuevo Hospital de Son Espases sufre numerosas goteras, tal como se ha podido observar durante el mismo día en el que el Govern ha recibido las llaves de la empresa concesionaria, después de tres años de obras, que comenzaron en el 2007.

Así, debido a las fuertes lluvias caídas en Palma durante la pasada noche y esta mañana, el aparcamiento de la nueva infraestructura sanitaria presentaba un gran número de goteras, que habían llegado a encharcar varias zonas.

Preguntado por esta cuestión, el conseller de Salud y Consumo, Vicens Thomàs, ha recordado que hoy se entregaba el edificio al Ejecutivo balear, si bien ha recalcado que antes de trasladar a algún paciente a Son Espases, operación que se llevará a cabo entre el 6 y el 8 de diciembre, "se solventarán los pequeños problemas que pueda haber".

En este sentido, ha señalado que el Govern aprovechará este tiempo de traslado del Hospital Son Dureta a Son Espases para finalizar las instalaciones de aparatos, verificar que todo funciona perfectamente y evaluar el estado de la infraestructura.

Precisamente, el presidente de la concesionaria, Víctor Revuelta, ha confiado en que el nuevo hospital esté en completo funcionamiento antes de final de este año, después de que se haya entregado el proyecto al Govern "en plazo y con todos los permisos en regla".

Revuelta ha recalcado que se trata de un hospital con una tecnología "puntera", hasta el punto de que es la "más avanzada" de toda Europa, por lo que ha expresado su "orgullo" por todo lo que se ha hecho en un proyecto que ha sido "tremendamente complejo".

En similares términos se ha expresado el presidente del Govern, Francesc Antich, quien ha remarcado que Son Espases será "uno de los mejores hospitales de Europa", al tiempo que ha agradecido la "magnífica implicación" de los trabajadores del Hospital Son Dureta, quienes, según ha admitido, "muchas veces no han contado con todos los medios que todos hubiéramos querido".

Finalmente, Antich ha tenido un especial recuerdo para el vigilante de las obras de Son Espases que falleció en 2007, después de que un 'cad de fibló' tirara la caseta en la que se había refugiado para protegerse del fuerte viento.