El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha afirmado que la Junta está estudiando la posibilidad de aportar financiación para evitar que se paralicen las obras de la Autovía a la Alcarria, tras la reducción de la partida destinada a esta obra en los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

En declaraciones durante la visita a la fábrica de Isover en Guadalajara, Barreda ha asegurado que actualmente "los abogados del Estado están estudiando las fórmulas para comprometernos nosotros incluso en la financiación del proyecto para que la adelantemos si ésa era la razón que entorpece que se licite lo antes posible".

Así, ha apuntado que desde la Junta se están dando "todo tipo de facilidades" para que esta autovía sea una realidad. "Estamos haciendo todo lo que está en nuestra mano". Barreda ha señalado que "lo complejo en una autovía es la realización del proyecto, la licitación, pero una vez que empieza ese proceso ya es imparable y se acaba haciendo".

Compromiso de zapatero

En este sentido, el jefe del Ejecutivo regional ha recordado que "tras la reunión en La Moncloa con el presidente del Gobierno", éste le "confirmó que se iba a hacer". "Y sigo confiando en su palabra. El hecho de que haya una partida (en los PGE) es importante, no obstante", ha agregado Barreda, quien ha asegurado que no le concede "tanta importancia a la cantidad como al hecho de que exista una partida, ya que todas son ampliables".

Por otra parte, y respondiendo a preguntas de los periodistas sobre el Parador de Molina, el presidente de Castilla-La Mancha ha recalcado que esta obra es "un empeño personal" cuyo proyecto está siendo laborioso y en el que se han encontrado "con problemas para encontrar el terreno". "Pero vamos a luchar también para sacarlo adelante, no he tirado al toalla", ha aseverado.