Ali Agca es arrestado en Estambul para su ingreso en prisión, tras ser liberado por error

La policía de Estambul detuvo el viernes a Ali Agca, el hombre que disparó contra el Papa, y después de que la Corta Suprema de Turquía dictaminara que su puesta en libertad fue incorrecta y que debe volver a prisión para cumplir una parte de su condena.
Ali Agca, rodeado por periodistas y policías de paisano, llega a un centro policial en Estambul tras su detención
Ali Agca, rodeado por periodistas y policías de paisano, llega a un centro policial en Estambul tras su detención
Efe
Ali Agca, rodeado por periodistas y policías de paisano, llega a un centro policial en Estambul tras su detención

Según explicó el gobernador de Estambul, Muammer Guler, las fuerzas del orden encontraron a Agca en el lugar que residía y éste no opuso ninguna resistencia a su captura.

Agca fue trasladado desde el lugar de su detención a la central de policía de la ciudad donde, tras el pertinente reconocimiento, será trasladado a prisión.

"Os estaba esperando", digo Agca a los policías que acudieron a detenerle, informó la cadena de televisión NTV. Después comenzó a decir algo sobre la justicia, pero decidió callarse. Los agentes ataron sus manos y le condujeron al coche patrulla, según el mismo medio.

La decisión de la Corte Suprema de devolver a Agca a prisión es inapelable. Tras su salida de la cárcel, el ministro de Justicia turco, Cemil Cicek, solicitó su vuelta al alegar que el cálculo de la condena cumplido por el recluso había sido hecho de forma errónea.

Una semana en libertad

Agca abandonó el pasado día 12 la prisión donde estaba ingresado, después de que un tribunal turco considerara que había cumplido ya su pena de cárcel e nTurquía.

La decisión fue tomada después de que los responsables de la prisión Kartal, en Estambul, enviaran un mensaje al tribunal, en el que aseguraban que había cumplido la pena que se le impuso.

Agca, acusado en Turquía de haber asesinado en 1979 al periodista turco Abdi Ipekci, disparó e hirió el 13 de mayo de 1981 al Papa Juan Pablo II en la plaza de San Pedro, y fue condenado a cadena perpetua en Italia.

Tras cumplir unos 20 años de la pena en Roma, fue indultado y extraditado a Turquía en junio del año 2000.

Juan Pablo II había manifestado su perdón a Agca, a quien visitó en 1983 en la cárcel romana de Rebbibia, donde en esos momentos estaba preso el turco.

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