El vicealcalde y consejero municipal de Presidencia, Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Gimeno, ha justificado la subida de los impuestos a las grandes empresas porque "no me puedo permitir el lujo de perder once millones de euros en ingresos si quiero garantizar la calidad de los servicios públicos" para añadir que "si quiero tener presupuesto tengo que aprobar las ordenanzas fiscales".

Así, ha defendido el aumento del 20 por ciento del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) no residencial y entre el 20 y el 52 por ciento de incremento del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) recogidos en la propuesta de ordenanzas fiscales para 2011.

Gimeno ha reconocido que es normal que genere rechazo esta propuesta porque los empresarios "son más o menos sensibles" a las ordenanzas fiscales, pero ha precisado que están en conversaciones con los empresarios que se verían afectados "para ver si hay aproximaciones y si se recogen algunos de los planteamientos o no".

En declaraciones a los medios de comunicación ha recordado que de las más de 65.000 empresas que hay en la ciudad la medida "afecta como máximo a 2.000 empresas", que son las que tienen mejor ubicación territorial y más actividad económica porque "a todas las demás no les afecta nada" al igual que a los zaragozanos, ya sean empresarios o ciudadanos individuales, puesto que el resto de impuestos y tasas les afectará un 1,9 por ciento de subida, por debajo de la inflación prevista del 2,3 por ciento.

Al respecto, ha precisado que al equipo de gobierno PSOE-PAR "nos hubiera gustado subir más las tasas medioambientales" (agua y basuras) sobre un 5 por ciento, pero ha calificado de "positivo" el acuerdo alcanzado con el grupo municipal de IU para que esta subida sea del 1,9 por ciento, y ha confiado en que se aprueben por el pleno.

Desde que se anunciara la propuesta de las ordenanzas fiscales, responsables municipales han comenzado a mantener conversaciones con los grandes empresarios. En esas conversaciones, Gimeno ha avanzado que los empresarios le han transmitido que "en época de crisis no se suban los impuestos" para señalar que "yo lo entiendo" y ha añadido que las opiniones de los técnicos son múltiples y "escucho a nivel político nacional e internacional que hay que hacer dos cosas: gastar menos y subir los impuestos".

Gimeno ha preferido referirse a las cuantías en lugar de los porcentajes que supondrá el aumento de impuestos y así ha calculado que "habrá empresas que la subida no les supondrá un aumento ni de cien euros y a otras muy importantes les subirá bastante más, pero en términos medios la subida es lo que es".

Estudiar el iae

En cuanto al IAE, que es más complejo porque se aplica según la clasificación de las categorías de las calles, ha estimado que "es hora de que estudiemos técnicamente el IAE y la clasificación territorial de todas las calles" al apreciar que se producen situaciones "muy injustas".

Así, ha expuesto el ejemplo de que en la calle Bretón "se paga más en término porcentuales que una empresa de las más importantes del mercado internacional que está en Puerto Venecia" y "esto es la historia de muchos años de la ciudad".

Por este motivo, desde el Ayuntamiento se ha ofertado a los empresarios constituir una ponencia que permita hacer una reclasificación de todos los espacios de la ciudad porque Zaragoza ha crecido mucho" y ha citado que "antes nadie preveía empresas en Puerto Venecia, pero hoy están" al igual que en Plaza Imperial, y "a lo mejor estas calles valen más".

Gimeno ha señalado que "a mi me preocupa más el IAE que el IBI" al precisar que el IBI afecta a los propietarios de los edificios, y el IAE se clasifica en nueve categorías de calles. Así, ha sintetizado que antes el número 9 de la clasificación correspondía a "las calles de los pobres y la 1 la de los ricos, pero ahora en el 9 están la mayor parte de los ricos". Esta situación se ha producido porque en su día "nadie previó que en Torrero, que podría ser una zona aproximada al 9, podrían ir las grandes empresas".

El vicealcalde ha desestimado que con la reclasificación de estas categorías para que las tipificadas de menor categoría pasasen a un grado mayor conlleve un efecto de expulsión de empresas porque "nosotros pagamos menos IAE que en Tarazona" para agregar que Zaragoza "paga menos IBI e impuestos que todos los pueblos de Aragón. No creo que se fueran de Zaragoza para ir a otros pueblos de Aragón".

A colación ha expuesto que "la parte mínima del IAE, que en Zaragoza está en el 0,66 en Tarazona está en el 1,13" y ha subrayado que la historia de la ciudad "no tiene con ver una política fiscal pensada en el IAE, que es un impuesto residual".

Para Gimeno, la realidad es que la clasificación 9 era la más baja y con menor potencial económico, pero la realidad a día de hoy es que la zona que tenía menos potencial económico es la zona con más potencial y áreas que están clasificadas como 8 y 9 tienen desgravaciones fiscales porque eran las zonas más débiles económicamente" y además la progresividad fiscal ha supuesto que a las zonas de menor categoría se les ha bajado.

"No me creo que ninguna empresa importante de la ciudad por una subida de mil euros o 200 euros más al año se va a ir de Zaragoza". Así, ha puntualizado que "lo que ha decidido el Ayuntamiento es que la categoría 9 no tenga bonificaciones fiscales. Nada más" y ha añadido que "a partir de ahora el que determina el tipo de la clasificación de las calles es el Estado".

Tras recalcar que esta subida "sólo afectará a las empresas que tienen actividad por más de un millón de euros" ha dicho "que todo lo que uno ve por la calle, excepto en zonas determinadas y grandes superficies, no les afecta".

Gimeno ha reconocido que un criterio de aplicación de la subida del IAE "más razonable" sería en función de los beneficios de las empresas, pero ha precisado que con la actual propuesta "entran a partir de un millón de euros de facturación, pero hay de tres millones y de cinco millones", que es un 8 por ciento del total de las empresas.

Además hay otro factor, ha dicho Gimeno, y es que el IBI y el IAE se deducen de los impuestos del Estado. Así, lo que paguen del IAE las empresas se lo deducen de los gastos del Impuesto de Sociedades pues se ahorran bastante" y en tono irónico ha dicho que "preferiría llegar a un acuerdo con las empresas para que me lo pagaran a mi en lugar de al Estado" porque "lo que a mi (Ayuntamiento) me pagan en noviembre se lo deducen en junio o julio del Impuesto de Sociedades".

"Quiero llegar a un acuerdo con las empresas en la clasificación territorial y convencerles de que prefieran pagar impuestos a la ciudad de Zaragoza y al Estado pues como está previsto en la ley, lo que me paguen a mi no lo pagan al Estado".

Acuerdo político

Para Gimeno el acuerdo del equipo de gobierno con el grupo municipal de IU "da la estabilidad necesaria para prever que se pueden sacar las ordenanzas fiscales y luego posteriormente los presupuestos, que es lo que me preocupa".

A lo largo de la tramitación de las ordenanzas fiscales "no iremos poniendo de acuerdo sin ninguna dificultad, excepto con el PP que no se pone de acuerdo en nada de nada y no tiene opinión favorable de nada desde que su nueva presidenta está al frente".

Sobre la postura del PAR, Gimeno ha apreciado que "como no puede ser de otra manera lo aceptó en el Gobierno y yo conocía su posición y ellos la mía" para recordar que el PAR abogaba por subir un 5 por ciento las tasas medioambientales "no lo he conseguido y no se si lo conseguiré, mientras que el PAR quería un IBI más bajo".

Su impresión es que la propuesta de ordenanzas fiscales "son fruto de la negociación de un gobierno en minoría" para augurar que "seguro que llegaremos a más acuerdos, pero se sigue necesitando la mayoría, y eso es lo que tenemos que conseguir".