El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, ha pedido al Ministerio de Fomento y concretamente a la Dirección General de Carreteras, que haga el "máximo esfuerzo posible" para que las obras de la A-40 no sufran más paralizaciones.

"Es una obra que tuvo muy mal comienzo y nos está costando muchos esfuerzos", ha asegurado García-Page a preguntas de los medios durante la presentación del proyecto para la creación de una nueva plaza en la calle Reyes Católicos, donde ha añadido que, "afortunadamente, los embotallamientos que se producen en la entrada de Toledo los hemos arreglado por nuestra cuenta".

Según ha explicado García-Page, las obras de la A-40 no están "formalmente" paralizadas y ha añadido así que "hay una confusión" cuando se habla de que en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del 2011 no hay una partida para esta obra. "Esta es una obra que se financia por sistema Alemán, es decir, se financia cuando acaba la obra", ha agregado.

Por ello, ha añadido que en la medida en que se produjo un aplazamiento de la obra hasta el 2012, "evidentemente el presupuesto no figura en el 2011, sino que tiene que figurar en el 2012". "Es un problema técnico que no explica, salvo para los que quieran manipular la información desde el PP, que tenga haber necesariamente un parón".

García-Page ha asegurado que "no vamos a parar" y que "si en un momento determinado hay que encabezar una protesta contra algún director general en el Ministerio de Fomento, seré el primero, no tenga duda alguna".

Otros asuntos

De otro lado, preguntado por la visita que han hecho este martes los concejales de Juventud y de Vivienda, Carmen Jiménez y Aurelio San Emeterio, respectivamente, a la zona de se ubicará la Casa de la Juventud, García-Page ha dicho que "no se siente tapado" y que los distintos concejales en sus áreas "tienen margen de maniobra y presentan todos iniciativas".

Asimismo, también a preguntas de los medios, ha dicho que el Gobierno municipal está siendo "tremendamente responsable" en la subida de los impuestos a los ciudadanos. "Hay gente que pide que no se suban los impuestos pero también se suban los servicios públicos y las inversiones", ha agregado.

Finalmente, ha llamado la atención de que en España haya personas "ultracapitalistas en el ingreso y ultracomunistas en el gasto. Esos dos extremos tendrían que estar fuera del sentido común y nosotros vamos a seguir nuestra política para que no se resienta ningún servicio público, infraestructura e inversión, sin rascar el bolsillo de los ciudadanos", ha concluido.