Responsables del Complejo Hospitalario de Ourense (CHOU) han planteado este martes la posibilidad de que un vial contaminado por bacterias, empleado para administrar la sedación, fuese el causante de la infección a varios pacientes, nueve ingresados y uno fallecido, que se realizaron endoscopias en el centro ourensano la semana pasada y después cayeron enfermos, lo que obligó a cerrar de manera preventiva una de las dos salas de este servicio.

En una rueda de prensa ofrecida este martes, los médicos de este servicio explicaron que las primeras hipótesis apuntan a la "contaminación por una bacteria" de dos viales utilizados para la sedación de pacientes con un medicamento conocido como Propofol, habitual para este tipo de prodecimientos.

Así, responsables de los servicios de Digestivo, Javier Fernández, Medicina Preventiva, Berta Uriel, y de Enfermedades Infecciosas del CHOU, Ricardo Fernández, recordaron que el brote bacteriano, ya controlado, fue detectado el pasado viernes día 24, cuando alguno de los pacientes que permanecían en observación tras la realización de una exploración endoscópica "comenzaron a mostrar un cuadro clínico fuera de lo habitual".

Ante esta situación, el CHOU inició la localización de los posibles afectados por este brote y determinó que los pacientes correspondían a los atendidos en este servicio los días 23 y 24 de este mes en una de las salas de endoscopia del hospital Santa María Nai. El cuadro clínico que presentaban los afectados consistía en escalofríos, nauseas, malestar y fiebre alta.

AFECTADOS

Según el Complejo Hospitalario, algunos de los pacientes que se realizaron las pruebas en esas fechas permanecieron sin síntomas, mientras que otros desarrollaron el cuadro clínico. A causa de esta infección permanecen ingresados y en observación un total de nueve pacientes en el CHOU, uno en la UCI y otros ocho en planta. La evolución de todos ellos es favorable.

Asimismo, hay constancia también del fallecimiento de una persona que realizó esta misma prueba en esta sala, si bien el cuadro "no coincide con el desarrollado por el resto de los pacientes" y hasta que se conozcan los resultados de la autopsia los facultativos no podrán determinar con seguridad si "la naturaleza de los síntomas tiene relación directa con la prueba digestiva" y si se le administró este mismo medicamento al paciente.

Además, como medida preventiva, el lunes permanecieron cerradas y sin actividad clínica todas las salas de exploración endoscópica digestiva de las que dispone el Complejo —en los hospitales Cristal y Nai— para facilitar la investigación. Sin embargo, este martes se han reanudado las pruebas en el Hospital Cristal, mientras que las del Santa María Nai continuarán cerradas como medida preventiva.

Procedimientos seguros

Los facultativos de este centro hospitalario ha recordado que los procedimientos endoscópicos son "seguros", aunque no están "exentos de complicaciones", y han explicado que no se había producido un caso de estas características desde la década de los 70. El Complejo ha manifestado su solidaridad con los afectados y su voluntad de aclarar lo sucedido.

El Defensor del Paciente ha pedido este martes a la Fiscalía del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia la apertura de una investigación para esclarecer este caso, la depuración de responsabilidades y la determinación de la existencia de más afectados.