Un niño de algo más de un año murió ayer lunes al ser atropellado por su padre, que no vio al pequeño cuando entraba con su vehículo al patio de la casa donde vivían, en la localidad cántabra de Cicero.

Según han informado a Europa Press fuentes de la Delegación del Gobierno en Cantabria, los hechos tuvieron lugar a las cinco y media de la tarde en el barrio Soliagua de la citada localidad, en el municipio de Bárcena de Cicero.

El padre, de 40 años y natural de Marruecos, se disponía a entrar en la casa conduciendo un 'todoterreno' Nissan Terrano cuando arrolló a su hijo, que se encontraba en el lugar, y al que no vio.

El niño, nacido en mayo de 2009 en Laredo, falleció en el acto. El pequeño fue trasladado en un primer momento al Hospital de Laredo y más tarde al Hospital Valdecilla de Santander para practicarle la autopsia.