El secretario de Acción Institucional de UGT-A, José Carlos Mestre, ha mostrado su "satisfacción" por la actitud "razonable" de las partes durante la negociación de los servicios mínimos de la huelga general del 29 de septiembre, donde "se ha hecho una interpretación responsable de los servicios esenciales".

En declaraciones a Europa Press, Mestre considera que las peticiones del sindicato sobre servicios mínimos "no han sido ninguna pretensión irresponsable, sino que hemos planteado algo razonable, fruto de la interpretación sobre cuáles son los servicios esenciales y en qué consisten los servicios mínimos".

Destaca que no han existido problemas en la negociación de los servicios mínimos en Empleo, ni en Justicia ni tampoco en las administraciones públicas, de forma que en esos casos "se prestarán los servicios esenciales como si se tratara de un día festivo".

"Había poco margen para la discusión, y la actitud de la Junta ha sido respetuosa y de lo más razonable, porque las administraciones, después de las decisiones judiciales en huelgas anteriores, ya saben determinar cuándo se dictan servicios mínimos abusivos y cuando no lo son, de forma que poco a poco la norma original, unida a las sentencias que los jueces han ido aceptando van haciendo más fácil la negociación sobre los servicios mínimos", agrega.

Servicios mínimos en farmacias

Agrega que "la única nota discordante" se ha produciendo en los servicios mínimos dictados por la Consejería de Salud en las oficinas de farmacia, en concreto sobre las competencias de la Junta en dictar servicios mínimos en ese sentido, toda vez que, a juicio de UGT, "la Junta se extralimita al dictar servicios mínimos sobre las farmacias, cuyos profesionales son autónomos y se rigen bajo un sistema de guardias y turnos".

Por ello, según apunta, UGT-A valorará impugnar o no los servicios mínimos de las farmacias, en función de lo que salga publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA).

Agrega que en esta negociación, los empresarios han mantenido "la misma actitud que suelen mantener de respetar el derecho a la huelga y que éste sea compatible con el derecho al trabajo aunque nosotras ahí argumentamos que hay 364 días al año para ejercer el derecho al trabajo".