El gobierno local del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha decidido abrir este miércoles las nuevas escuelas infantiles basándose en sus propios informes técnicos, avalados por la jurisprudencia marcada por el Tribunal Supremo, admitiendo por otro lado que, sobre el particular, existe un conflicto de competencias con la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias.

Así lo afirmó el portavoz de la Junta de Gobierno, Sebastián Franquis, quien ha manifestado que "la misma sólo se basa en el interés general de los padres y los alumnos", así como que "el Ayuntamiento está actuando con total lealtad institucional" y espera que en los próximos días se puedan resolver estos conflictos de interpretación de la normativa aplicable.

A su vez, recordó, a través de un comunicado, que desde el pasado mes de junio, el Ayuntamiento ha ido comunicando a la Consejería de Educación, tanto la finalización de las obras de los nuevos centros, como el propósito de abrir las escuelas en el mes de septiembre.

Insistió en el principio de cooperación interadministrativa como forma de despejar los obstáculos que van surgiendo y que en cualquier caso no desvirtúan el logro de haber puesto en marcha cinco nuevos centros de este tipo y la ampliación de más de quinientas plazas de educación municipal. GARANTÍA

Franquis aseguró que los informes que han elaborado los técnicos municipales cuentan con la seguridad y la garantía de que la normativa que exige el Gobierno de Canarias a las escuelas infantiles no es de aplicación, ya que se está exigiendo al Ayuntamiento que estos centros cumplan con el Código Técnico de la Edificación aplicable a los hospitales, obligación que ha sido descartada por sentencias de la Sala Tercera del Tribunal Supremo.

A su vez, el portavoz anunció que "el Ayuntamiento asume la responsabilidad de abrir las escuelas infantiles y eliminar de esta forma la incertidumbre que incide en los padres de los alumnos afectados".

Anunció que se remitirá en las próximas horas la información con la decisión adoptada a los centros y a los padres y madres, al mismo tiempo que afirmó que no se cobrará la cuota de los alumnos afectados hasta que este servicio funcione con normalidad.

De esta forma, el Ayuntamiento quiere transmitir tranquilidad a los padres, ya que las nuevas escuelas infantiles que se han abierto este año son las más modernas de Canarias, ofrecerán el mejor servicio a la ciudad y cumplen con la normativa exigible a estos centros.

El portavoz municipal finalizó aseverando que "sobre la seguridad de los niños, el gobierno local no va a permitir ni un segundo de duda".