No buscan trabajo porque han perdido la esperanza de encontrarlo. En esta situación se encuentran 54.288 catalanes y la cifra se ha triplicado desde los 17.124 de 2008, según CCOO. Tan apartados están del mundo laboral que se les califica como inactivos.

"La mayoría son hombres jóvenes y con un bajo nivel educativo", afirma la responsable de Mercado de Trabajo de este sindicato, Romina Garcia. "Es alarmante porque es gente que, en plena edad de trabajar, han decidido no entrar en el mercado laboral", explica. En concreto, el 58% de estos "desanimados" son analfabetos o no han pasado de la Educación Primaria.

También hay titulados universitarios, que suponen el 3%. "Es normal. Quien se forma más quiere participar más en el mercado laboral. Los que han estudiado menos tienen menos expectativas", comenta Garcia. El 51% de los desesperanzados son hombres. Esto se explica porque las mujeres han conservado mejor el trabajo durante la crisis.

El 38% tienen 30 años o menos. El colectivo de más de 55 años, por otros motivos, también es significativo. ¿Como se llega a esta situación? "Los diarios y los amigos no dan noticias positivas. Si te has quedado en el paro, envías mil currículums y estás todo el día. O bien no te llaman o las entrevistas son inútiles. Ante la perspectiva de fracaso entra en escena el desaliento y lo más cómodo puede ser ahorrarte frustraciones, fracasos y que te digan ‘no’", concluye Miguel Ángel Manzano, psicólogo del ISEP Clínic.