El Comité de Bici Urbana Guardabarros de Salamanca criticó hoy la "precaria" red de aparcamientos para bicicletas en la ciudad tormesina después de haber realizado un estudio sobre la misma.

Del documento se desprende "un déficit de plazas en la almendra central de la ciudad, donde tan solo existen cinco unidades, permitiendo el aparcamiento únicamente a una veintena de bicicletas".

En este momento, la disposición de este tipo de aparcamientos en los centros y facultades de la Universidad de Salamanca (USAL) triplica el número de plazas municipales y además "tiene una mayor demanda", apuntó Guardabarros.

Frente a las cinco unidades para aparcar bicicletas en el centro de la ciudad colocadas por el Ayuntamiento, la Universidad de Salamanca cuenta en cambio con seis ubicaciones donde se pueden aparcar el doble de bicicletas, afirmó.

Además, según el colectivo, fuera de la zona centro, la oferta de la USAL vuelve a "superar con creces" en plazas de aparcamiento a las ofertadas por el Ayuntamiento. Un total de 40 ubicaciones permiten el aparcamiento de casi 150 bicicletas diarias, mientras que la red con que cuenta el Ayuntamiento sólo permite un total de 50 bicicletas, indican los datos del colectivo.

En este sentido, Guardarbarros incidió en que "la inversión en infraestructuras para el aparcamiento de bicicletas tiene un bajo coste y representa una de las mejores formas para impulsar de forma eficaz el uso de la bicicleta".

"Los espacios céntricos de la ciudad apenas atienden a los mínimos exigibles por un sector creciente de población que utiliza la bicicleta diariamente, mientras que la Universidad de Salamanca ha apostado durante los últimos años por crear una sólida red de aparcamientos bici en todos sus centros y facultades aumentando muy significativamente el tránsito ciclista diario, la gran inversión llevada a cabo en carriles bici ha aumentado la demanda durante los fines de semana", expuso.

Según Guardabarros "la infraestructuras para aparcar bicicletas representan una de las mejores apuestas para una movilidad sostenible útil y no solamente de recreo y ocio". La colocación de unidades de aparcamiento en puntos neurálgicos de la ciudad "es una asignatura pendiente en la cual se debería centrar en este momento el Ayuntamiento".

Tras la ampliación de los kilómetros de carril bici, Guardabarros reconoció el aumento de plazas de aparcamiento aunque subrayó "el escaso uso de los mismas debido al modelo utilizado y a las ubicaciones a veces inexplicables". Uno en la Avenida del Cementerio y otros dos casos en el Campus Miguel de Unamuno donde la oferta está ya cubierta por los aparcamientos universitarios son dos ejemplos "significativos", concluyó.