La Conselleria de Gobernación, a través del Centro de Coordinación de Emergencias (CCE), ha decretado la preemergencia por fuertes lluvias en el interior norte de Castellón y en el litoral norte de esta provincia, tras recibir el último parte de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), mientras que se ha retirado la preemergencia por lluvias intensas en el litoral de la provincia de Valencia.

El último boletín de fenómenos adversos remitido por la Agencia Estatal de Meteorología prevé para este lunes chubascos acompañados de tormenta que pueden ser fuertes, en el caso del norte de Castellón localmente muy fuertes, de manera que se pueden registrar precipitaciones de hasta 40 litros por metro cuadrado en una hora, con una probabilidad que oscila entre el 10 y el 40 por ciento.

Ante este fenómeno adverso, que la Agencia Estatal de Meteorología prevé que comience a la 6.00 de este lunes y que se dé por finalizado alrededor de las 0.00 horas del martes, se ha establecido el nivel naranja en el norte de la provincia de Castellón.

Asimismo, el CCE ha puesto en marcha el Plan Especial ante el Riesgo de Inundaciones para coordinar los recursos que sean necesarios en caso de que se produzcan incidentes relevantes como consecuencia de las lluvias.

La Generalitat recomienda informarse de la evolución de la situación a través de los medios de comunicación, alejarse de las riberas de los ríos y barrancos y no permanecer en los puentes, usar el vehículo sólo si es absolutamente imprescindible e informarse de la situación antes de iniciar el viaje, así como circular preferentemente por carreteras principales y autopistas y no intentar cruzar un lugar inundado o un puente que ofrezca dudas sobre su resistencia.

En el caso de fenómenos tormentosos con aparato eléctrico, aconseja evitar permanecer en lo alto de colinas, permanecer en el coche si se está conduciendo, tras bajar la antena de la radio y cerrar puertas y ventanas, cerrar las puertas y ventanas de la casa para evitar corrientes de aire y desconectar los aparatos eléctricos para evitar que sean dañados por subidas de tensión.

Cuando la tormenta sorprende en el monte sin tener cerca un coche o un refugio, no hay que refugiarse nunca bajo un árbol dado que podría actuar como pararrayos. Lo más conveniente es esperar que pase la tormenta en cuclillas, quietos, lo más agachados posible, tocando el suelo sólo con las botas. También se puede esperar sentados encima de un objeto aislante, una cuerda enrollada o la mochila si no tiene armadura metálica.