El secretario de Organización de COAG-A, Eduardo López, ha pedido este jueves al Gobierno central y a la Junta de Andalucía que lleven a cabo actuaciones para hacer frente a las políticas agrarias de la Unión Europea (UE), que "ha desarmado al sector agrario y ganadero y ha dejado la alimentación en manos de la especulación".

"Es un S.O.S, estamos aquí y necesitamos apoyo de instituciones y del Gobierno", ha subrayado López, a lo que, en rueda de prensa, ha añadido que "se dan las condiciones para que la UE cambie su propuesta y rearme al sector agrario europeo, un sector potente". En este sentido, ha señalado que es "hora de que el Gobierno y la Junta aprovechen la situación para presionar a la UE y propongan una Política Agraria Común (PAC) que salve la agricultura y la ganadería andaluza".

Así, ha apuntado que si Europa quiere contar con soberanía alimentaria y garantizar un número suficiente de agricultores y ganaderos debe o "aumentar el presupuesto y las subvenciones o regular los mercados mediante mecanismos para que el productor obtenga una renta digna". 8.000

Explotaciones ganaderas menos

En concreto, COAG-A ha mostrada la "difícil" situación del sector ganadero andaluz, donde en 15 meses han desaparecido 8.000 explotaciones. Esta crisis, según explica López, viene marcada por la crisis de los cereales, que influye directamente en la renta agraria del productor a través del precio de los piensos, que suponen el 70 por ciento de los costes totales de una explotación; y por el bajo precio en origen de la carne y la leche.

COAG-A ha explicado que en las últimas semanas se asiste a un proceso de incremento de precios de las materias primas destinadas a la alimentación animal que amenaza con provocar una crisis en los sectores ganaderos similar a la acaecida durante 2007 y 2008.

Esta escalada de precios se inició con la incertidumbre provocada por las consecuencias de la sequía e incendios forestales que afectan a Rusia, que se tradujo en la decisión de restringir las exportaciones de trigo por parte de este país.

A partir de esta situación, comenzó un aumento de compras especulativas en los mercados de futuros que ha llegado a encarecer el producto hasta en un 40 por ciento, provocando una reacción que se traslada al resto de la cadena agroalimentaria.

Según COAG-A el escenario actual "no justifica el aumento de precios actual" y señala que la respuesta habrá que buscarla "una vez más en el interés especulativo que aprovecha y promueve estas situaciones de incertidumbre amparado por la ausencia de políticas reguladoras".

"producimos alimentos"

Por su parte, el responsable de Ovino y Caprino de COAG-A, Antonio Rodríguez, ha dicho "no entender" como "en una situación tan difícil los políticos dejan que se desmantele el medio rural" y añadió que "nadie se plantea que producimos alimentos".

En cuanto al sector del porcino, su responsable en COAG-A, Enrique Acción, ha señalado que la subida del precio de los piensos llega en un momento esencial para el sector del porcino, en la pre-montanera, momento en el que el cerdo debe llegar a un peso concreto, se necesita de un aporte extra de pienso y la subida de los precios afecta más.

Por último, el responsable del sector de Vacuno de COAG-A, Ángel Ruano, ha señalado que para el vacuno en extensivo ha sido un inverno duro por las intensas lluvias, lo que ha significado un aporte de suplemento de pienso durante más tiempo, lo que es un coste extraordinario. Además, ahora el precio de los terneros ha bajado en torno al 13 por ciento. En el caso de intensivo, los animales se alimentan con cereales y paja y la subida les influye directamente.

"Todo el mundo quiere que estemos en el campo, hay muchas exigencias que cumplimos, pero de la ganadería vive todo el mundo menos el ganadero", ha apostillado.