Una joven con problemas de movilidad pide "ayuda" a la Junta al sentirse "encerrada" en su propia casa

María del Mar Domínguez, una joven de 29 años afectada por el trastorno de la ataxia, que le provoca problemas de coordinación y movilidad, se siente "encerrada" en su propia casa, ya que para salir del portal de su vivienda, ubicada en la barriada de Isla Chica de Huelva capital, debe sortear siete escalones, lo que hace que "no pueda salir con normalidad".

María del Mar Domínguez, una joven de 29 años afectada por el trastorno de la ataxia, que le provoca problemas de coordinación y movilidad, se siente "encerrada" en su propia casa, ya que para salir del portal de su vivienda, ubicada en la barriada de Isla Chica de Huelva capital, debe sortear siete escalones, lo que hace que "no pueda salir con normalidad".

En declaraciones a Europa Press, María del Mar Domínguez ha comentado que por la estructura del bloque —construido hace más de 20 años— no es posible ubicar una rampa, por lo que la única posibilidad para evitar la escalinata es la instalación de una plataforma vertical mecánica, 'salvaescaleras', la cual supone "un coste de más de 3.000 euros".

La comunidad de vecinos, formada en su mayoría por pensionistas y personas viudas, no puede asumir el gasto, motivo por el cual Domínguez ha solicitado ayuda a la Delegación de Igualdad y Bienestar Social que, tras realizar un peritaje del edificio y analizar su situación, le ha comunicado que "no podía beneficiarse de una subvención al superar los ingresos establecidos en los requisitos, unos 500 ó 600 euros", ha explicado Domínguez.

Por ello, la afectada, que reside sola junto a su madre, ha narrado que para salir "necesita la ayuda de alguien que pase por la calle o algún vecino" lo que supone "gran cantidad de tiempo y una incomodidad", y que hace que "no pueda salir como le corresponde a una chica de su edad".

María del Mar Domínguez padece ataxia desde los 16 años y al tratarse de un trastorno degenerativo, no puede desde hace algunos años "ir a ninguna parte sin la silla", con la cual accede al ascensor del bloque "con dificultades, pero al menos puedo entrar", ha señalado. Esta joven forma parte de la Asociación Onubense de Ataxias, (Asoda), con cuyos miembros le gusta reunirse, pero "salir de casa me supone dos horas y es realmente muy incómodo".

Domínguez confía en que "alguien pueda ayudarle a solucionar el problema" y ha instado al departamento de Igualdad y Bienestar Social a que se busquen alternativas al objeto de contar con esta plataforma en su edificio y "disponer así, de más facilidades para salir y desarrollar mi vida", ha concluido.

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