La empresa Constantia Tobepal invertirá en la planta de Logroño entre 9 y 10 millones de euros a lo largo de los próximos tres años, una decisión que supondrá un aumento de plantilla de unos 20 a 30 trabajadores "de mano de obra directa". La ampliación también afectará de una forma similar a la planta de la firma en Burgos.

Así lo ha confirmado el director general de Constantia Tobepal, Stefan Bogoll, tras reunirse con el presidente del Gobierno de La Rioja, Pedro Sanz, a quien ha garantizado la viabilidad de la planta de Logroño y el mantenimiento de los puestos de trabajo, tras su reciente adquisición por el grupo austriaco Constantia Flexibles.

Tras el encuentro, Sanz ha mostrado su "satisfacción" ante lo que ha calificado como "una buena noticia tras la incertidumbre que se ha podido pasar hasta la compra de la planta por una nueva empresa". En sus palabras, la nueva propietaria "es una gran empresa que da seguridad al empleo y expectativas de crecimiento".

Igualmente, el mandatario riojano ha destacado "la fortaleza" de Constantia Flexibles, "una empresa que va a tener su razón social en La Rioja" y con la que ha mostrado su voluntad de colaboración "como siempre se ha tenido con la empresa, que formaba parte de las señas de identidad de la comunidad".

Constantia cuenta con una facturación de 976,5 millones de euros en el año 2009 y 4.498 empleados, "lo que permite despejar las dudas acerca de la viabilidad de la planta logroñesa", situada en la avenida de Burgos, número 67.

Además, el jefe del Ejecutivo regional ha resaltado que Constantia Tobepal tiene dos plantas en España, una en Logroño (de 17.000 metros cuadrados construidos y 217 puestos de trabajo) y otra en Burgos (de 30.000 metros cuadrados construidos y 254 puestos de trabajo), y su razón social radicará en Logroño.

Según ha explicado Stefan Bogoll, la empresa está dedicada a la producción de materiales para embalajes flexibles para productos de alimentación, con especial radicación en el mercado español; también tiene una división cosmética, con trabajos para L'Oreal, por ejemplo, "que es número 1 en Europa".

Por su parte, la planta de Logroño está especializada en la elaboración de envases para la industria farmacéutica, siendo la de Constantia Tobepal la más importante de España y una de las líderes internacionales en la producción de sobres farmacéuticos y de laminados de 'cold form', productos entre los que Bogoll ha destacado "los sobres de Frenadol o los envases de aspirinas".

El responsables de la empresa ha recordado que la anterior propietaria se tuvo que deshacer de Tobepal tras la compra de la firma Amcor, con lo que el Tribunal de la Competencia de la UE le obligó a la venta de la firma.

El proceso de compraventa se inició en diciembre de 2009, "y ha durado 9 meses con momentos de incertidumbre, sobre todo para los trabajadores". "La buena noticia -ha dicho- es que el comprador ha sido la firma ideal, con un encaje perfecto dentro de su negocio actual".

En este sentido, ha apuntado que Constantia no contaba con la tecnología de realización de productos para farmacia de la planta de Logroño "por lo que, al ser los únicos con esta técnica, el grupo anticipa un crecimiento importante", que ha cifrado "en unas expectativas de un aumento del 30% en los tres próximos años".

La inversión prevista alcanzará los 9 a 10 millones de euros, especialmente dedicada "aproximadamente en un tercio" a aspectos medioambientales, y el resto, para sistemas de calidad de producto y temas relacionados con la productividad. Esta situación conducirá, según Bogoll, a una reorganización de los turnos.

"En este momento -ha detallado- la planta está al 65 por ciento de capacidad, trabajando de lunes a viernes y con turnos que no se hacen". Por ello, ha apostado por la realización de turnos completos y trabajo los siete días de la semana, lo que conducirá a un aumento de plantilla "de un 30 por ciento de mano de obra directa", alrededor de 20 ó 30 trabajadores.

En este sentido, ha incidido en que las dos plantas de la firma en España tuvieron el año pasado una facturación de 103 millones de euros en los últimos doce meses, "y la previsión que hacemos es de, para este ejercicio, que la facturación sea de 115 millones".

Así, Bogoll ha apuntado que el negocio de la farmacia ha crecido una media del 13% por año de 2000 a 2008 y también ha aumentado el mercado del cuidado de la salud por el envejecimiento de la población, "por lo que, al ser el 90 por ciento de la producción de la planta de Logroño el tema farmacéutico, se va a beneficiar de estas condiciones".