La Guardia Civil de Oviedo ha detenido a doce personas, cuyas iniciales son C.B.A., N.R.C., M.B.B., J.R.J., M.V.B., M.A.V.V., J.P.B.M., M.V.V., J.B.V., A.B.V., O.V.V., J.I.V.D., acusados de perpetrar importantes robos en la Fábrica de Loza de San Claudio. Los detenidos, alguno de ellos residentes en otras provincias, contaban con el apoyo de personas que se encargaban de realizar tareas de vigilancia mientras ellos perpetraban los robos.

Los efectos sustraídos; varias vajillas de loza valoradas en unos 37.000 euros, así como diferentes objetos metálicos tales como moldes, bombas de agua, elementos de las máquinas de elaboración de las vajillas; y objetos pendientes de valoración y de importante cuantía, según ha informado la Guardia Civil.

Los Componentes del Instituto Benemérito, comenzaron los operativos de vigilancia a raíz de las denuncias efectuadas por los representantes de la Fábrica que notificaron un importante saqueo de las vajillas que aún permanecían almacenadas en la factoría de San Claudio, así como de gran cantidad de objetos metálicos provenientes en su mayoría de las máquinas de elaboración de los productos.

En las inspecciones oculares realizadas en el lugar de los hechos, se detectaron significativos daños en puertas de acceso, ventanas y cierres perimetrales, además del desorden de las distintas dependencias.

A fin de esclarecer los hechos delictivos, la Guardia Civil intensificó la vigilancia sobre el perímetro de la factoría, así como en las principales vías de comunicación de ésta.

Fruto del operativo, el Área de Investigación citado, detectó la presencia de al menos tres grupos delincuenciales distintos, que de forma perfectamente organizada se adentraban en el perímetro de la factoría y tras forzar distintas barreras de acceso a sus instalaciones, seleccionar y cargar los efectos objeto de las sustracciones en furgones habilitados para el transporte de materiales voluminosos y pesados.

Los dispositivos de vigilancia continúan operativos, no descartándose nuevas detenciones, mientras que por parte de la empresa propietaria continúan las tareas de traslado y aseguramiento de los efectos de mayor valor de la que fuera una importante fuente de ingresos para numerosas familias de centro de la región, la cual ha sido declarada como Bien de Interés Cultural.