La mezquita clausurada en Lleida, la de la calle del Nord, ya ha abierto negociaciones con el Ayuntamiento de la ciudad al que presentará alegaciones al cierre de quince días decretado el martes, el segundo en mes y medio por la misma razón: exceso de aforo.

El imán de la mezquita, Abdelwahab Houzi, ha explicado a Europa Press este miércoles que se ha reunido con altos cargos del consistorio —todos hombres— para tratar el cierre. Sin dar detalles de la conversación, Houzi ha avanzado también que la comunidad estudia pedir al Ayuntamiento pedir autorización para sacar algunas cosas del templo.

"Tenemos que pensar, para entrar pediríamos autorización", ha dicho en clara alusión a las dos veces que se rompió el precinto, en una ocasión con autorización municipal y en otra sin ella.

En la puerta de la mezquita y en una librería marroquí de la misma calle los responsables de la comunidad han colocado un cartel en el que anuncian el traslado de los rezos al cercano parque de los Camps Elisis.

"Durante el cierre temporal de la mezquita las cinco oraciones se harán, de momento, en el sitio de costumbre (Camps Elisis) hasta nuevo aviso", reza el cartel.

La comunidad de la mezquita todavía no ha presentado las alegaciones al precintado. Tiene quince días para entregarlas al Ayuntamiento que en el primer cierre aceptó en las alegaciones el compromiso de la comunidad de controlar el aforo y permitió la reapertura del templo. Esta vez, según dijo el martes el alcalde, el cierre podría ser definitivo.