Para entender la obra, una dura crítica a aquellos hechos, hay que tener en cuenta que torna es una palabra catalana que hace referencia a la cantidad que se añade a una mercancía cuando  ésta no llega al peso por el que se vende. Así, Boadella representa al polaco como una torna, un personaje utilizado por la justicia para desviar la atención del ajusticiamiento del anarquista.

Verdugos ya ancianos

En la nueva versión, los personajes son militares que participaron en el consejo de guerra y que están en un geriátrico. Allí se enteran de que se vuelve a estrenar la  obra de La torna y, como consecuencia del alcohol, comienzan a ver fantasmas fruto del sentimiento de culpabilidad que les persigue.

* Teatro Alameda. C/ Córdoba, 9. Hoy, mañana y el domingo, a las 20.30 h. Precio: 24 euros. Información y venta en el teléfono: 952 213 412.

Por qué merece la pena una revisión

Artista, escritor y hombre de teatro, tiene una particular relación con el franquismo. Albert Boadella es el creador y director de la compañía de teatro Els Joglars.

Por la investigación del periodista Raúl M. Riebenbauer se sabe ahora que el nombre de Heinz Chez, el polaco ajusticiado, era falso y que tampoco se trataba de un indigente sin familia. La razón para la revisión de La torna es, en palabras de Boadella, muy simple: «Si la obra tuvo sentido tres años después de la ejecución, ahora retoma una nueva significación con los descubrimientos que muestran que no fue otra cosa que un crimen de Estado».