El padre de la joven presuntamente asesinada en Rute (Córdoba) en septiembre de 2006, Javier Romero, ha afirmado que la justicia se está "riendo en su cara" una vez que el presunto autor, su ex novio, ha quedado en libertad tras cumplir el periodo máximo establecido de prisión preventiva de cuatro años.

En declaraciones a los periodistas durante una concentración celebrada en la puerta de la Audiencia Provincial de Córdoba junto a la Plataforma Cordobesa contra la Violencia a las Mujeres, el padre ha manifestado que la medida cautelar que le han impuesto "parece de cachondeo" y el objetivo principal de su lucha es que lo condenen.

Además, ha asegurado que, una vez que se celebre el juicio, el próximo día 2 de noviembre, se exigirán responsabilidades a quien corresponda, como por ejemplo a la Junta de Andalucía, que es quien tenía la tutela de la menor cuando ocurrieron los hechos.

Por su parte, la portavoz de la plataforma, Carmen León, ha lamentado la actuación de la justicia por ser "muy lenta y atender las normas hasta un extremo que indigna". En su opinión, a poco más de un mes para que se celebrara el juicio, se debía haber alargado el tiempo de prisión del presunto asesino, adelantar la vista oral o endurecer las medidas cautelares.

Y es que el acusado ha quedado en libertad con la única medida cautelar de presentarse ante la Guardia Civil sólo una vez por semana. Ante esto, los abogados de la acusación estiman que el joven debe estar localizado por GPS, debe presentarse diariamente en el juzgado que determine la Audiencia Provincial y se le tiene que retirar el pasaporte, en caso de que lo tuviera.

La vista oral se celebrará el próximo 2 de noviembre con un tribunal popular en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial. Las acusaciones piden 20 años de cárcel para el procesado por un delito de asesinato, al igual que la fiscalía, mientras que para un supuesto cómplice, M.R.C., que le prestó el arma homicida, la representación de los padres solicitan 15 años de cárcel.

Los hechos

Los hechos tuvieron lugar en la noche del 12 de septiembre de 2006, cuando la joven, en compañía de otras chicas, volvía al centro de protección de menores en Rute en el que estaba acogida bajo tutela de la Junta de Andalucía, concluyendo así el paseo al que los menores residentes en dicho centro estaban autorizados tras la cena, entre las 22,45 y las 23,15 horas en periodo vacacional, como era el caso.

En ese momento, su ex novio, Manuel García, con el que la joven había roto y que al parecer había esperado su regreso en la calle, ante el citado centro de protección de menores, supuestamente le disparó tres veces con una escopeta, alcanzando a la menor en dos ocasiones, una en un muslo y otra, la más grave, en el abdomen, a la altura del estómago, con un proyectil que le provocó heridas en un riñón y también un grave daño medular, del que fue posteriormente intervenida quirúrgicamente en dos ocasiones, con la pretensión de evitar futuras afecciones neurológicas a la menor que, finalmente, quedó parapléjica.

La joven permaneció ingresada cinco semanas en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, mientras que su ex novio permanece en prisión preventiva desde entonces, ya que, tras efectuar los disparos contra la menor, llamó a la Guardia Civil y se autoinculpó, siendo detenido poco después de hacer dicha llamada telefónica.

El juicio tuvo que suspenderse debido a la muerte de la víctima en octubre del año pasado, por lo que el expediente volvió al Juzgado de Instrucción número 3 de Lucena para la práctica de nuevas pruebas.