La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, ha recordado en Logroño que es "absolutamente ilegal" fijar precios mínimos para el vino y ha asegurado que estas cantidades deben fijarse por acuerdos tomados en las interprofesionales.

Espinosa ha visitado la capital riojana para inaugurar las obras realizadas en el Paseo del Ebro, en las que su departamento ha invertido 840.000 euros, además de abrir oficialmente las instalaciones del Parque Municipal de Jardinería.

A preguntas de los medios de comunicación, la ministra ha afirmado que "los temas de precios deben resolverse en las interprofesionales, que si se crearon fue para el entendimiento de toda la cadena de producción y poder activar medidas o acuerdos en su seno".

Ha recalcado que, en España, no se está dando ninguna otra situación similar a la de La Rioja ni que "tampoco hay previsión de que se den", y ha afirmado que "va a haber menos cosecha, no va a haber excedentes, y se está vendiendo más en España y se está exportando más", con lo que el mercado "está funcionando bien".

Espinosa ha insistido en que existe una normativa que recoge "los costes de producción y que nadie puede obligar a cobrar por debajo de ellos, quien demuestre que eso es así, que sepa que está recogido en una normativa".

Sin embargo, ante las peticiones en este sentido de los agricultores, ha desechado la posibilidad de fijar precios mínimos "porque eso es absolutamente ilegal, el precio mínimo dependerá de los costes y de la calidad, y la situación en La Rioja no tiene nada que ver con la de Extremadura, Castilla-La Mancha o Castilla y León".

"Se pueden acordar precios de forma individual, según las condiciones, y se pueden denunciar prácticas ilegales, pero no fijar precios mínimos, que, además, no coincidirían con la realidad del sector", ha subrayado la titular del ramo.

Además, se ha referido también a la Ley de Calidad Agroalimentaria, sobre la que ha dicho que el texto "ha pasado ya por la primera lectura", al tiempo que ha mostrado su voluntad en que "sea consensuada, tenemos todo el tiempo del mundo para hablar sobre ella, porque no queremos confundirnos".