El alcalde de Santander, Íñigo de la Serna, ha opinado que es "absolutamente injusta" la modificación del anteproyecto de Ley que permite a los ayuntamientos menos endeudados pedir créditos a largo plazo en 2011, y ha confiado en que "se rectifique".

A preguntas de la prensa sobre el hecho de que Santander sea uno de los consistorios que no pueda recurrir al endeudamiento por tener una deuda superior al 75% de sus ingresos corrientes, el alcalde ha opinado que se trata de una medida "injusta", que se ha adoptado "sin diálogo ni negociación previa", y que además vulnera la suficiencia financiera de los ayuntamientos.

En el caso de Santander, ha recordado que el Consistorio ha rebajado 14 puntos el nivel endeudamiento en tres años y actualmente "está en un nivel que aquí nadie recuerda". Por ello, y en relación a las críticas socialistas, ha opinado que "acusar al alcalde del nivel de deuda no se ajusta a la realidad".

De la Serna ha recordado que el Ayuntamiento tomó la decisión de no pedir ningún crédito en 2011, además de haber adoptado medidas para reducir la deuda. Asimismo, ha indicado, este año no se ha pedido crédito a los bancos y se ha amortizado deuda. "Hemos hecho los deberes económicos para rebajar el endeudamiento", ha resaltado.

Además, para el regidor, el problema de la deuda nacional no es de los ayuntamientos, que sólo representan el 5 por ciento de la misma, por lo que es "injusto" que "los que menos culpa tienen" y "los que menos tienen que ver con el origen del problema" sean los que no pueden recurrir a la deuda, mientras que "los que representan el 75% del problema pueden seguir pidiendo créditos; y los que son más del 20, también".

Según el alcalde, "todos" los ayuntamientos han recurrido al crédito porque el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "no ha movido un papel en el proceso de descentralización" y ha tomado medidas que "perjudican la capacidad financiera de los ayuntamientos". Igualmente, ha apuntado que los consistorios "están endeudados" porque asumen competencias impropias, pagando servicios "que deberían haber pagado otros".

Por todo ello, para De la Serna se trata de una medida "absolutamente injusta", que ha confiado que "se rectifique" para que "ayuntamientos como el nuestro, que han rebajado el nivel de endeudamiento, no tengan ahora que asumir las consecuencias de una decisión que no sabemos cuantificar".