Los 6 escándalos de Gore Vidal

Convertir en gay al Charlton Heston de 'Ben Hur', escribir el guión de una película porno... El fallecido literato estadounidense armó la marimorena en el mundo del cine. Por YAGO GARCÍA
Los 6 escándalos de Gore Vidal
Los 6 escándalos de Gore Vidal
Los 6 escándalos de Gore Vidal

Fuera del mundo anglosajón, y más concretamente de EE UU, Gore Vidal nunca llegó a tener la enorme influencia que ostentaba en su país de origen. De modo que, pasada la noticia de su fallecimiento, es fácil olvidarse de que el escritor y ensayista existió alguna vez. Craso error, porque este neoyorquino, de familia tan pija como ilustre, no sólo era un gran hombre de letras, sino también un imán para las anécdotas y los escándalos. Así pues, como estarás imaginando, juntar a Vidal con el mundo del cine (que conocía a fondo desde pequeño) era como juntar al hambre con las ganas de comer. No nos referimos sólo a que destapara el romance de su madre con Clark Gable, o a que ayudase a Moe a robarle un poema a Lisa Simpson, sino a todas las turbulencias que provocó su paso por el séptimo arte. Aquí las tienes.

Conseguir que Charlton Heston encarnase a un gaycharlton_heston_stephen_boyd_ben-hur

Habéis leído bien: con su sibilino talento, Vidal consiguió que el futuro presidente de la Asociación Nacional del Rifle y notorio conservador interpretara a un personaje que había yacido con varones. Y no en cualquier filme, además, sino en el mismísimo Ben-Hur. Aunque no aparece en los créditos (cosas de los sindicatos estadounidenses del cine y de sus normas), el escritor colaboró en adaptar la muy mojigata novela de Lewis Wallace. Y llegó a la conclusión de que dicho tocho necesitaba algo de tensión extra. ¿Su solución? Pues poner en boca del héroe de la cuádriga y de su enemigo Mesala (Stephen Boyd) aquél diálogo que rezaba: "Estábamos muy unidos... en todos los aspectos". El cual admite tantas lecturas como ese otro de Espartaco sobre las ostras y los caracoles. Décadas después, Vidal declaró en el documental El celuloide oculto que el director William Wyler estaba al tanto de la jugarreta. ¿Cómo reaccionó Heston? Pues muy a su estilo: afirmando que Gore Vidal no había escrito una línea de guión, y que aquello era una mentira cochina.

Convertir a Raquel Welch en transexualraquel_welch_myra_breckinridge

Puede que Myra Breckinridge, adaptación de la novela homónima estrenada en 1970, no haya pasado a la historia por su calidad. Más bien todo lo contrario: se la considera como una de las peores películas con base literaria jamás estrenadas. Pero, ojo, porque para el público del momento resultó todo un impacto ver a la sex symbol de Hace un millón de años en un transexual recién operado que se venga de aquellos que le discriminaron cuando aún era un chico, violándoles con un consolador. Y que, para colmo de transgresiones, se lía con Farrah Fawcett, la belleza rubia de Los ángeles de Charlie. La presencia de John Huston y de una Mae West casi momificada sólo añadieron octanos al delirio.

Conseguir que Katharine Hepburn hiciese de villanakatharine_hepburn_montgomery_clift_de_repente_ultimo_verano

Como frecuentador del ambiente gay e intelectual de Nueva York, Vidal conocía de cerca a Tennessee Williams. De ahí que fuese una buena opción para llevar a la pantalla De repente, el último verano, una de las obras más desaforadas del autor de Un tranvía llamado deseo. El texto original, con sus lobotomías, su incesto insinuado y sus caníbales (en el Mediterráneo) ya era morboso de por sí, pero el escritor se las apañó para cargar aún más las tintas involucrando a Katharine Hepburn, una de las actrices más queridas de Hollywood, como la maléfica madre de Elizabeth Taylor. Las dos intérpretes lo hicieron tan bien que fueron nominadas al Oscar, y el filme arrasó en taquilla. Y, según Vidal, las críticas que tachaban al filme de "degenerado" tuvieron bastante que ver en ese éxito.

(Casi) robarle la novia a Paul Newmanjoanne_woodward_paul_newman

Efectivamente: al igual que Truman Capote, por ejemplo, un gay declarado como Gore Vidal tenía un probado magnetismo para las chicas. Así que no nos extraña que la siempre modosa Joanne Woodward, su compañera de piso durante los primeros 50, se pensara dos veces el casarse con él antes de darle el "sí" definitivo a uno de los actores más guapos de la historia. Con cierta modestia, el escritor afirmó en sus memorias que el affaire había sido un engaño urdido entre Joanne y él para que el hombre de los ojos azules se llevase a su amiga al altar, pero lo cierto es que Woodward y él estuvieron prometidos oficialmente.

Escribir el guión de una película pornocaligula_malcolm_mcdowell

Como ya hemos ido viendo, a Gore Vidal no sólo le gustaba sembrar el escándalo, sino también sembrarlo a lo grande. De ahí que no nos extrañe su participación en la tremebunda Calígula de Tinto Brass, sin duda la película pornográfica más cara de la historia. Producida por el editor de Penthouse, Bob Guccione, la historia del rodaje de Calígula daría para un artículo entero, pero resumiendo diremos que Peter O'Toole y John Gielgud se pasmaron al comprobar (en el estreno) que el filme incluía escenas de sexo explícito, que Maria Schneider (El último tango en París) abandonó la película tras rodar sólo una escena y que Malcolm McDowell (La naranja mecánica) se empeñó en eliminar casi todas las escenas de sexo entre hombres del guión original, que eran muchas. Esto último causó la retirada de Vidal, quien (para variar) exigió que su nombre no figurase en los créditos.

Defender públicamente a Roman Polanskiroman_polanski

Retirado del cine desde hacía décadas salvo para hacer pequeños cameos (en Gattaca, Ciudadano Bob Roberts y Conspiración en la sombra), Vidal dio su última campanada cinematográfica en forma de unas declaraciones muy escandalosas. El caso ocurrió en 2009, cuando el director polaco acababa de ser arrestado en Suiza por su violación de Samantha Geimer (ocurrida presuntamente en 1977). Las palabras del literato fueron: "¿Es que tengo que sentarme y llorar cada vez que una puta adolescente dice que se han propasado con ella?". En la misma entrevista con el Atlantic Monthly, Vidal afirmaba que la raíz de la persecución contra Polanski no era su delito, sino el antisemitismo: "La idea de que la chica era un angelito con el vestido de primera comunión, violada por un asqueroso judío, es muy objetable".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento