Ante el Comité Ejecutivo Regional del PP de Madrid, que ella misma preside, Aguirre se refirió al caso del militar arrestado por opinar que las Fuerzas Armadas tendrían que intervenir si algún estatuto de autonomía sobrepasase los límites de la Constitución, como una más de las "trampas que constantemente nos están tendiendo", dentro de una estrategia consistente en "hacernos aparecer como bichos raros a los del PP".

En ese sentido, dijo que "nosotros denunciamos la política que busca el enfrentamiento entre españoles del señor Rodríguez Zapatero y denunciamos también a todos los que, como este general Mena, se salen de su sitio e incumplen las leyes, con toda contundencia y sin reservas". "En una democracia liberal y avanzada como la española, los militares están en silencio y a las órdenes del único poder, que es el que dimana del pueblo español y que está a las órdenes del poder civil.

Y punto", resumió la presidenta madrileña. Para Aguirre, el origen de la polémica está en que "en todas las actuaciones desde que llegó al cargo (el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero) después del atentado del 11-M, busca de una manera sistemática la división entre los españoles".

"Embarcado en una misión que él debe de creer histórica -la de demoler el consenso constitucional y la Constitución del 78-, Rodríguez Zapatero ha conseguido que donde antes había consenso, ahora hay disenso y donde había acuerdo, hay desacuerdo (...) y donde antes había ánimo de reconciliación, ahora se escarbe en el rencor, y donde antes había ganas de encontrar lo que nos une, ahora hay ganas de exagerar lo que nos separa", indicó.