La multinacional catalana de restauración Áreas, especializada en áreas de servicio y aeropuertos, garantiza la bajada de precios en buena parte de las comidas y bebidas que se van a ofrecer en el Aeropuerto de Asturias, tras obtener la concesión de cinco establecimientos durante un periodo de ocho años.

Así lo afirmó hoy en rueda de prensa el vicepresidente ejecutivo de la multinacional, José Gabriel Martín, que garantizó además que la empresa absorberá al total de la plantilla incorporando además un trabajador y que insistió en que se mantendrán los cocineros del actual concesionario.

Como ejemplo de la bajada de precios indicó que descenderán los del agua o los refrescos, así como de muchas comidas. El plato del día pasará de los 18,75 euros actuales a los 12,85. "Queremos ofrecer un servicio de calidad a mejor precio, porque el cliente lo necesita", dijo Martín, que aseguró que la empresa se adaptará a las necesidades de los viajeros que pasan por el aeropuerto asturiano, tal y como han hecho en el resto de los aeródromos en los que están presentes.

Y es que Martín recordó que con esta adjudicación, Áreas está presente en 20 aeropuertos españoles con un total de 209 establecimientos, y en 59 aeropuertos a nivel mundial. La empresa prevé unas ventas de 28 millones de euros durante el periodo de concesión en Asturias y contará con un total de 42 empleados.

El vicepresidente ejecutivo de Áreas indicó que la intención es "aclarar" algunas cuestiones aparecidas en prensa sobre el nuevo servicio de restauración que no son correctas. En este sentido indicó que se mantendrán los cocineros y se les darán "las mejores materias primas nacionales y regionales", por lo que las comidas típicas como la fabada asturiana están más que garantizadas con el nuevo concesionario.

Además desmintió que la cafetería principal del aeropuerto asturiano vaya a convertirse en un 'self-service' y explicó que todas las cafeterías contarán con servicio en barra o en mesa con sus respectivos camareros.

Indicó que el compromiso contractual es tener listo en un año la nueva imagen de las cafeterías y todos los nuevos servicios, aunque la compañía espera poder hacerlo en un plazo de unos seis meses.