El obispo de Santander, Vicente Jiménez, acompañado de 145 laicos de la Diócesis cántabra, encabezará una peregrinación a Tierra Santa que partirá del aeropuerto de Parayas este martes, día 31, a las 12.35 horas.

El grupo regresará a Cantabria en la tarde del 7 de septiembre y durante los tres primeros días de su estancia en Tierra Santa se trasladarán a la comarca de Tiberíades, que fue uno de los principales escenarios de la predicación de Jesús. Los últimos cuatro días, la peregrinación permanecerá en Jerusalén.

La mayor parte de los peregrinos que realizan este viaje pertenecen a Grupos de Lectura Creyente de la Palabra de Dios, que se crearon en la Diócesis cántabra hace 15 años a través del Servicio Bíblico Diocesano que dirige el sacerdote Juan Valero.

Actualmente hay unos 3.000 laicos pertenecientes a alguno de estos grupos de lectura, diseminados entre las parroquias cántabras y del Valle de Mena.

Durante la estancia se celebrará diariamente una Eucaristía en los lugares más significativos del recorrido, y también se mantendrán dos encuentros de oración. El primero será por la noche en el centro del lago de Tiberíades, mientras que el segundo se celebrará en Getsemaní, que fue el lugar donde Cristo oró, al pie del Monte de los Olivos, la última noche antes de ser crucificado, y que se halla dentro de la ciudad de Jerusalén.

El grupo también "renovará los compromisos sacramentales en los distintos lugares a los que se acuda", ha precisado Valero.

A la peregrinación diocesana se añadirá, para hacer juntos el viaje de ida y vuelta, otra que realiza la parroquia de Nuestra Señora de la Encina. Este último grupo peregrinará de forma independiente, aunque coincidirán en una celebración eucarística.