Objetos en peligro de extinción

Muchos aparatos que eran imprescindibles en nuestra vida cotidiana hace sólo unos años están ahora a punto de desaparecer.
.
.
Jorge París
.
Del entrañable tomavistas Super 8 al molesto busca, de las enciclopedias al reloj de pulsera, la revolución tecnológica ha arrasado en los últimos años con un sinnúmero de objetos que antes resultaban insustituibles para el ocio o para el trabajo.

La llegada del ordenador personal, los soportes digitales (CD y DVD) y el teléfono móvil han llenado los armarios y los cubos de basura de un buen número de agendas personales, cintas de casete o películas de vídeo VHS.

Los fabricantes de relojes llevan años tratando de afrontar la caída de ventas provocada por la llegada de los móviles. Aunque el reloj de pulsera ha corrido mejor suerte que el floppy disk, los carretes de fotos o las diapositivas. Para muchos, la única utilidad que les queda es ir a parar a un Cash Converters (foto).

Sin buzones ni cabinas

Por obra de la revolución tecnológica, las ciudades están perdiendo poco a poco dos de sus habitantes más característicos: las cabinas de teléfono y los buzones de correos. Las primeras han sido sustituídas por teléfonos empotrados –cada vez más escasos–.  En cuanto a los segundos, languidecen cada vez con menos cartas que echar a la saca.

Máquina de escribir. Fue la reina de despachos y oficinas desde su invención en Italia en 1855. Pero sus teclas dejaron de sonar la década pasada.

Teléfono de disco. La aparición del teléfono de teclas terminó en los ochenta con la tradicional forma de marcar con el dedo índice. Por no hablar del móvil.

El disco de vinilo. Compañero inseparable de la música en el siglo xx, ahora se ha convertido en un objeto de colección para fanáticos y profesionales.

Calculadora. Con su inocente apariencia, la calculadora electrónica dio inicio a la revolución digital a principios de los sesenta. Ahora es otra víctima del PC.

Vídeo VHS. En los 80 mató a la estrella de la radio y poco después a su hermano el Beta. Pero ahora le toca morder el polvo frente al DVD. ¿Y luego qué?

Tocadiscos. Del gramófono al tocata, parecía un objeto condenado. Pero consigue sobrevivir en la actualidad recluído en las cabinas de los DJ y en las casas de melómanos y nostálgicos.

PC. En los ochenta empezó a extenderse por centros de trabajo y domicilios hasta su hegemonía actual. Pero ya le amenazan los nuevos dispositivos portátiles.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento