Luego, piense en un baño de vapor con aroma a eucalipto. Y después, un masaje relajante por todo el cuerpo. Los 300.000 sevillanos que viven en el Aljarafe ya no tienen que venir a Sevilla para tomar baños termales, recibir masajes y disfrutar de mil y un tés. Desde el 15 de septiembre están abiertos en Bormujos los primeros baños árabes del Aljarafe, que ya tiene una lista de clientes superior a los 1.500.Francisco Moreno, propietario de estos Hamman (en árabe), decidió dar un vuelco a su vida ideando estos baños termales: «Antes había trabajado en otras cosas –cuenta– pero tras probarlos, pensé, ¿por qué no abrir unos para los vecinos del Aljarafe? Fue una buena idea».
Y así está resultando, porque cada vez son más los sevillanos que se acercan a sus instalaciones para probar el circuito termal. «Lo recomendable es acudir al menos una vez al mes para descargar tensiones y relajar los músculos», dice Francisco.
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