El presidente de la Federación Malagueña de Peñas, Centros Culturales y Casas Regionales 'La Alcazaba', Jesús González, exigió al Ayuntamiento de la capital "otro modelo de feria, distinto al actual", y sobre todo demandó que "se elimine totalmente" el botellón.

Así de crítico se mostró González al hacer balance de estas fiestas, que tuvieron lugar del 14 al 21 de agosto. Declaró que "ésta no es la feria que yo quiero para el Real de Cortijo de Torres, hay que rediseñarla, hacer una nueva, más tradicional, y evitar que se deteriore, como está ocurriendo".

En este sentido, indicó a Europa Press que la capital malagueña debe tener una feria andaluza. "Es una celebración que cuesta mucho y hay que darle mucha categoría; se vende imagen de Málaga y son muchos los visitantes que vienen", advirtió.

Para conseguirlo, consideró que lo primero que hay que hacer es "prohibir totalmente el botellón, pero tanto en el recinto ferial como en los alrededores", porque, "al final, se da una mala imagen de una feria que, ante todo, debería ser típica". Además, añadió, "hay que evitar las malas consecuencias que se derivan de esta práctica".

En opinión del presidente de la Federación de Peñas, "con el botellón no caben medias tintas, o se tolera o no, y en la Feria de Málaga no se debe tolerar por las consecuencias negativas que conlleva", poniendo como ejemplo los comas etílicos.

"La Feria de Málaga no tiene que estar condenada a ser la del botellón", subrayó González, quien lamentó la imagen que, finalmente, se ha dado con la existencia de una zona acotada en el Real donde unos 2.000 jóvenes podían reunirse para beber.

A diferencia del año pasado, aseveró el representante de las peñas de Málaga, "a primera hora de la noche estos jóvenes estaban un poco más apartados de la portada de la Feria, pero la cuestión es que luego se dispersaban".

Subarriendo de casetas

De igual modo, también denunció que en la denominada zona familiar del recinto ferial se siga produciendo el subarriendo de casetas para montar mesones y discotecas, una práctica "ilegal", tal y como recordó. "Está prohibido, pero se sigue haciendo, quizá es que no se controla lo suficiente", señaló.

En cuanto a los ingresos registrados por las 61 casetas de la Federación de Peñas, que ocupan la mitad de la superficie del Real, González sí reconoció una disminución, aunque confió en que, "al final, los resultados no sean mucho peores que los de 2009".

"Ha habido días flojos y otros un poco más fuertes, por lo que esperamos medio salvar la Feria o, al menos, igualar la del año pasado, que ya supuso un descenso con respecto a 2008", expuso el presidente.

Sí valoró, no obstante, el dispositivo de limpieza puesto en marcha por la empresa Limasa, así como la seguridad, a través de los efectivos de la Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía, que "parece que se ha traducido en la disminución del número de incidentes graves". Por último, también destacó un crecimiento de los visitantes durante la Feria de Día en el Real.