La DYA ha repartido durante la Semana Grande de San Sebastián 3.000 pulseras amarillas para pedir que "se diga no a conducir tras haber bebido alcohol", según ha indicado en un comunicado. En total espera llegar a las 6.000 durante el fin de semana que cierra estas fiestas.

DYA ha explicado que, como en años anteriores, durante la Semana Grande donostiarra está llevando a cabo una campaña, dirigida principalmente a los jóvenes, para pedir que "se diga no a conducir después de haber bebido".

Según ha indicado, como muestra de conformidad con esta propuesta, se solicita ponerse la citada pulsera 'ALK-STOP' que la Asociación está repartiendo de forma gratuita.

DYA ya ha entregado, en el puesto que ha instalado en el Boulevard donostairra, más de 3.000 pulseras antes y después de los fuegos artificiales y prevé que los próximos días se distribuyan otras tantas.

La asociación ha destacado la "excelente acogida" que está teniendo esta propuesta y ha recordado que los efectos del alcohol están presentes "en un 40 por ciento de los muertos en accidente de tráfico" y que las intoxicaciones por alcohol, o consumo de otras drogas constituyen aproximadamente el 32 por ciento de las asistencias que lleva a cabo estos días, con una media de edad entre las personas afectadas en torno a los 21 años.

Finalmente, ha indicado que esta campaña también cuenta con una página web, 'www.ALK-STOP.com', a través de la cual se puede participar en el sorteo de alcoholímetros digitales entre quienes aporten sus opiniones sobre los riesgos de beber y conducir, o hagan llegar su foto con la pulsera 'ALK-STOP' puesta.