El vicepresidente del Gobierno de Canarias, José Manuel Soria, ha querido dejar claro su apuesta y la de su partido por que el pacto de gobierno entre CC y PP continúe, fundamentalmente porque, a su juicio, "la estabilidad y la lealtad en política, como en la vida misma, son valores superiores", y ha advertido que "jugar con la estabilidad es hoy, aparte de irresponsable, contraproducente en términos políticos".

Tal y como recoge su blog, Soria ha incidido en que desde que Canarias iniciase su andadura autonómica "se ha practicado sistemáticamente un deporte (...) con rasgos propios conocido como el de la inestabilidad política", ya que "los sucesivos gobiernos desde la aprobación del Estatuto de Autonomía han sido (...) objeto de permanente inestabilidad, de manera que ningún ejecutivo ha conseguido terminar la legislatura con la misma composición que la inició".

Es más, Soria ha advertido que si se repasa la reciente historia política de las islas, en Canarias "hay multitud de ejemplos que acreditan que, ceteris paribus, la inestabilidad institucional, y por tanto los cambios que suponen, coinciden con las etapas más sombrías de las sociedades y organizaciones que las sufren".

El también presidente de los 'populares' canarios ha señalado que en la historia de la autonomía de Canarias "las inestabilidades en los gobiernos trajeron siempre resultados adversos", de ahí el "enorme valor" que otorga a la "estabilidad actual" al entender que es "buena para el interés general".

En consecuencia, José Manuel Soria ha valorado la "estabilidad política" de la presente legislatura porque "ha sido positiva, entre otras cosas, porque en tiempos de crisis hay que tomar decisiones que son duras aunque necesarias y no hay que tomar otras que, en cambio, son facilonas pero contraproducentes".

Para el vicepresidente canario, no se puede decir que "sí a todo" porque "eso equivale a considerar menores de edad a los ciudadanos". "Los ciudadanos saben perfectamente lo que ocurre y lo que hay. Es más, si se participa activa y directamente en cualquiera de las redes sociales se podrá comprobar que la gente no cree ni en los pajaritos preñados ni en los peces de colores, de ahí que jugar con la estabilidad sea contraproducente en términos políticos".