El Museo de la Evolución Humana (MEH) de Burgos ha recibido más de 50.000 visitantes desde que fuera abierto al público el día 14 de julio, hasta ayer, 13 de agosto, con una media de 1.800 visitantes al día, durante un periodo en el que además fueron 1.942 las personas que utilizaron el autobús-lanzadera puesto en marcha el 27 de julio y que parte desde el MEH hacia los yacimientos de la Sierra de Atapuerca, Patrimonio de la Humanidad.

De las 50.368 visitas, 16.000 se registraron durante las jornadas de puertas abiertas, que se celebraron del 14 al 25 de julio, 31.664 desde el 27 de julio hasta el 13 de agosto, ambos inclusive (los lunes cierra) y 762 personas en grupos, según informaron a Europa Press fuentes de la institución museística.

Además, el número de Amigos del Museo se incrementó durante este primer mes a 1.684.

Desde la dirección del Museo se destaca en este primer mes el servicio de la lanzadera que "cada vez es más demandado por los clientes", así como "la procedencia" de los visitantes, que concurren desde todas las Comunidades Autónomas españolas, especialmente los procedentes de Cataluña, País Vasco, Madrid, Andalucía y la propia Castilla y León.

El número de peregrinos que visita el Museo también se ha incrementado en los últimos días y según informa la coordinadora general del Museo, Aurora Martín, los días de mayor afluencia son los miércoles y los jueves, cuando se atiende las solicitudes de más de 2.000 personas.

En este sentido, Martín recomendó utilizar el teléfono y el correo electrónico para solicitar las entradas para la visita conjunta al MEH, yacimientos y Parque desde el propio Museo ya que "se suelen terminar con dos o tres días de antelación".

Al margen de los viajes propiciados a la sierra de Atapuerca desde el propio Museo, hay posibilidad de visitar el yacimiento en diferentes horarios, así como el Parque Arqueológico, recordaron las mismas fuentes.

Entre lo más valorado por los visitantes se encuentra la presentación de los fósiles originales y la 'Galería de la Evolución', además de la propia arquitectura del Museo y el trabajo de los monitores, aunque reclaman una "mayor" señalización sobre la ubicación del Museo en la ciudad.