La Infanta Elena ha sido hoy recibida con aplausos por los aficionados de Palma de Mallorca en la primera corrida de toros a la que acude un miembro de la Familia Real desde la prohibición de los toros en Cataluña.

Doña Elena llegó al festejo a las 21.45 horas — quince minutos antes de que diera comienzo— acompañada de María Zurita, sobrina de los Reyes e hija de la Infanta doña Margarita y del doctor Carlos Zurita en el tendido, y ambas se sentaron en las primeras filas de barrera.

La Infanta llegó discretamente y ocupó su localidad, aunque inmediatamente fue reconocida por un aficionado que comenzó a aplaudir para agradecer su asistencia a los toros. Acto seguido, el resto de los aficionados que se encontraban en la plaza —que registraba menos de media entrada— agradecieron el gesto de Doña Elena con un aplauso cerrado, en un momento en el que existe una fuerte controversia por la prohibición en Cataluña.

Precisamente en los aledaños de la plaza de Palma estaban concentrados desde las ocho de la tarde un grupo de manifestantes que protestaban contra la celebración de la corrida y pedían que se prohibiera la Fiesta con consignas en contra del maltrato de animales.

El cartel de la corrida de esta noche lo formaban Manuel Jesús 'El Cid', David Fandila 'El Fandi' y Alejandro Talavante. Se trata de la segunda corrida de toros que se celebra en Palma tras la prohibición de las corridas en Cataluña el pasado 28 julio.

Apoyo de la familia real a la fiesta

Los miembros de la Familia Real han mostrado numerosas ocasiones su apoyo a la Fiesta Nacional. La propia Infanta Elena presidió, el pasado 25 de mayo, la tradicional corrida organizada por la Asociación de la Prensa de Madrid en Las Ventas. Asimismo, en la boda de la princesa Victoria de Suecia en junio pasado lució un vestido rosa de clara inspiración torera.

Por su parte, el Rey Don Juan Carlos mostró su apoyo a la Fiesta Nacional durante la entrega de los Premios Universitarios y Trofeos Taurinos de 2009 otorgados por la Real Maestranza de Caballería de Sevilla el 25 de marzo. Al ser preguntado por los periodistas presentes en el acto si su presencia podría interpretarse como un respaldo a los toros, sobre los que ya pesaba la posibilidad de que fueran prohibidos por el Parlamento catalán, el Monarca respondió que "por supuesto".

Según destacó Don Juan Carlos en su discurso, el estímulo de los premiados en aquella cita sería "clave para el progreso de numerosos chicos y chicas que depositarán su confianza en ellos" y cuyo espíritu, indicó, "permitirá a los galardonados alcanzar metas personales que espolearán en nuestra sociedad la voluntad de superación, en favor de Andalucía y de España entera".