Los efectivos de la Policía Autonómica incluidos en el operativo especial de vigilancia del Xacobeo realizaron casi 1.600 patrullas y 22.000 identificaciones de personas y 174 vehículos en los primeros siete meses del año en todas las rutas del Camino, especialmente en el francés y en el portugués. Además, se llevaron a cabo 750 visitas a albergues, una media de cuatro al día.

Junto al alcalde de O Pino, Manuel Taboada; el conselleiro de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza, Alfonso Rueda, ha realizado el balance de las actuaciones de los agentes de la Policía Autonómica, que conforman un grupo de alrededor de 20 efectivos en patrullas distribuidos por distintos puntos de la Ruta.

Así, durante su visita a un punto del Camino Francés, en Lengüelle, para conocer "sobre terreno y hacer un pequeño tramo acompañando a los efectivos", Rueda ha recordado que este dispositivo se enmarca en el plan especial diseñado y aprobado a principios de año y ha destacado que constituye una del as partes "más importantes", la de "garantizar la seguridad de los miles y miles de ciudadanos" que todos los días transitan por los caminos.

De esta manera, ha destacado que se han efectuado unos 1.600 patrullajes, junto con más de 700 visitas a albergues para realizar visitas periódicas, y unas 22.000 identificaciones, "una molestia mínima pero necesaria durante estos meses para garantizar la seguridad", ha apostillado.

Asimismo, también ha subrayado que este cuerpo de seguridad también realiza una "labor muy importante" en el desarrollo de sus competencias como policía medioambiental", ya que "hacen cumplir la Ley de protección del Camino", y, en este sentido, ha agregado el conselleiro, ya han realizado más de 200 actuaciones con carácter medioambiental.

"Cuando llevamos ocho meses (casi) del Camino de Santiago, los millones de personas que se van a acercar deben saber que los cuerpos des seguridad van a estar vigilando", ha aseverado el conselleiro de Presidencia.

Sin "incidencias dignas de destacar"

Uno de los policías que se encontraba en ese momento de patrulla, Enrique, ha comentado en declaraciones a los medios que no se han producido "incidencia dignas de destacar". "Hay muchísima más gente que otros años", ha indicado, sin embargo, el agente.

Enrique ha comentado que la mayor parte de la gente solicita "traslados a centros médicos" o información. Su labor, ha señalado, es la de "auxilio y asistencia al peregrino, informar, y velar por la seguridad".

Tampoco tienen constancia, ha agregado, de que se produzcan "más robos" por la afluencia de gente en este Año Santo frente a los que se registran habitualmente e, incluso, tampoco se han producido situaciones más graves como "agresiones sexuales" sí registradas en otras ocasiones. "Se ve un ambiente muy bueno y dicen que hay muy buen compañerismo", ha remachado.

Problemas albergue

Por otro lado, el alcalde de la localidad de O Pino, próxima a Santiago de Compostela y uno de los tramos más transitados, ha defendido que los problemas registrados este domingo en el polideportivo, en que se obstruyeron los vestuarios, fue una cuestión "puntual", como la que puede ocurrir en un "domicilio particular".

"Fue algo puntual", ha asegurado el regidor, quien recuerda que han pasado "casi 6.000 personas" por el polideportivo y "no hubo queja ninguna". "Si se atascan los sumideros de una casa, cuanto más un sitio por el que pasan 5.000 personas", ha justificado Manuel Taboada.

Acompañamiento a policías

El lugar donde se desplazó el conselleiro de Presidencia se encuentra en Lengüelle, a unos 200 metros de la carretera general, en un cruce de caminos donde, al mediodía de este martes, varios niños jugaban con sus bicicletas y algunos de los peregrinos que pasaban se preguntaban si "sucedía algo", ante la presencia de más gente de lo habitual.

Precisamente, mientras duró el acto, los agentes policiales tuvieron ocasión de informar a dos peregrinos ciclistas de la ruta por la que seguía el Camino, ya que se habían desviado en el cruce; así como también enseñaron el equipo y motos que emplean al conselleiro, aficionado a este tipo de vehículos como él mismo les trasladó a los efectivos a los que acompañó durante un tramo del Camino.