No es necesaria una formación específica para desarrollar videojuegos. Se trata de animadores, diseñadores y programadores, fundamentalmente.

Según fuentes de la productora española Pyro Studios, también hay un porcentaje de personas autodidactas en este sector. Más que los títulos académicos, cuenta la maestría técnica que se pueda demostrar.

Lo que está claro es que la formación en España escasea. Por eso, casos como el de Juan Diego Alegre y sus cinco compañeros no es frecuente. Tras cursar uno de los pocos máster para creación de videojuegos que se pueden hacer sin viajar al extranjero, fueron a la última Campus Party de Valencia, donde crearon Tetr4Brick, un programa multijugador para móviles que recibió una mención. «Siempre tuve la ilusión de crear un videojuego –explica Juan Diego–, es un canal para transmitir al mundo ideas de la mejor manera que existe: entreteniendo y enseñando».