El presidente del Govern, Francesc Antich, ha esperado que el conflicto de los controladores aéreos "acabe cuanto antes", porque el mero hecho de anunciar una huelga "ya tiene efectos sobre la economía", por lo que, según ha recalcado, "no es ninguna buena noticia para ninguna Comunidad Autónoma y menos para Baleares, donde el turismo es su actividad principal y, por tanto, la incidencia de los aeropuertos tiene un peso muy grande".

Tras reunirse en el Palacio de la Almudaina con el Rey, Don Juan Carlos, Antich ha recordado que Baleares es la "única Comunidad Autónoma, cuyo Producto Interior Bruto depende en un 60 por ciento del turismo", por lo que ha insistido en que una huelga de los controladores aéreos afecta al archipiélago "seguramente más que a otros lugares".

Por ello, ha manifestado que el Govern está "muy en coordinación" con el Ejecutivo central para ver lo que se puede hacer, con el fin de evitar la huelga, al tiempo que ha recordado que la Secretaría de Estado de Transportes y Aena están hablando con los representantes de los controladores para "intentar evitar que esta situación empeore" tratar de lograr un acuerdo que impida la huelga a finales de agosto.

Precisamente, Antich ha aprovechado su encuentro con Don Juan Carlos para expresarle su "preocupación" por este conflicto, mientras que el Rey también se ha mostrado "preocupado por todo aquello que pueda influir para que el tema turístico no vaya como tuviera que ir".

Por su parte, el presidente de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), Juan Ignacio Lema, ha propuesto acudir a "cualquier mecanismo legal", incluso "un arbitraje independiente", que se realizaría de "mutuo acuerdo", si no se alcanza hoy mismo un acuerdo con los controladores aéreos que evite la huelga anunciada.