El arzobispo de Santiago de Compostela, monseñor Julián Barrio, ha animado a los jóvenes participantes en las jornadas 'Peregrinación y Encuentro 2010' (PEJ 2010) a "mantener" la identidad cristiana y a "no esconderse" como si ser cristiano fuese algo "vergonzoso" o motivo de "marginación".

Así lo ha manifestado durante su intervención en el acto de acogida de los 12.000 jóvenes que estos días llegan a Santiago para participar en el encuentro organizado por la Iglesia, que reúne en la capital gallega a numerosas diócesis de toda España y Portugal.

El arzobispo ha incidido en la "necesidad" de que los jóvenes "mantengan" su "identidad cristiana" en la sociedad que les "tocó vivir" y les ha animado a "construir" una convivencia "serena", "acogedora" y "solidaria" en donde se respire la "sinceridad" y todos los hombres, independientemente de su raza o color, se consideren "hijos de Dios".

Asimismo, Julián Barro ha pedido al Apóstol que ayude a que la gente se "mantenga firme" en este tiempo en que "soportan el peso de la soledad agobiante" y se "padece la confusión de la desorientación ética y moral".

Finalmente, el arzobispo ha reconocido "el trabajo y dedicación" de todos los jóvenes participantes en estas jornadas y también ha recordado que este acto es un "primer paso" hacia la próxima Jornada Mundial de la Juventud Madrid 2011.