El consejero de Interior, Rodolfo Ares, ha considerado, cuando se cumple un año sin atentados mortales de ETA en el Estado, una "tremenda equivocación" que "mucha gente y algunos dirigente políticos" en Euskadi estén queriendo hacer política "como si ETA hubiera desaparecido" porque "no estamos en el post ETA, sino trabajando para acabar definitivamente la actividad terrorista".

En una entrevista concedida a Radio Euskadi, recogida por Europa Press, Ares ha manifestado que la ausencia de atentados responde a que "ETA ha estado acosada desde un punto de vista policial, ya que no sólo se han detenido terroristas, sino que se ha desmantelado la dirección en varias ocasiones y hay una presión permanente de todas las políticas en todos los lugares del mundo".

El titular vasco de Interior ha destacado que "está habiendo claramente una desactivación ética y social del terrorismo y de quienes amparan y justifican la violencia desde las instituciones liderada por el lehendakari" y ETA "está más débil que nunca, tiene más dificultades para poder moverse, pero no ha renunciado a la violencia y tenemos que seguir manteniendo permanentemente la vigilancia muy alta, la alerta máxima, para conseguir que no cometa acciones terroristas".

En ese sentido, ha advertido que, "aunque no ha habido atentados con asesinatos, ETA ha seguido cometiendo actividades terroristas, porque sigue manteniendo la extorsión a empresarios, queriendo prepararse para tener zulos y sigue queriendo constituir comandos", por lo que el hecho de que no haya habido asesinatos en un año es "fruto de todo el trabajo que hemos hecho las instituciones, el estado de derecho, las policías, los jueces, la colaboración internacional y la presión ciudadana".

"seguir trabajando"

Ares ha señalado la necesidad de "trabajar" para que ETA no cometa atentados y ha asegurado que están trabajando "con todos los instrumentos que tenemos para seguir deteniendo a terroristas y ponerlos a disposición de la justicia, como hemos venido haciendo durante todos estos meses".

A su juicio, "lo más importante es que no nos engañemos y que las angustias no nos lleven a confundir los deseos con la realidad", ya que "hay mucha gente en Euskadi y algunos dirigentes políticos que están queriendo hacer política como si ETA hubiera desaparecido, y es una tremenda equivocación porque no estamos en el post ETA, estamos trabajando para acabar definitivamente con ETA".

Por ello, ha considerado que "todos deberíamos mantener la máxima exigencia, no sólo a ETA para que abandone la actividad terrorista, sino también a todos aquellos que desde el entorno de ETA dicen que quieren hacer política exigirles que apuesten, con toda claridad, por la política, alejándose definitivamente de la violencia, respetando las reglas de juego, los derechos humanos y la legalidad".