El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha acusado este jueves al Gobierno central de "imponer" un "nuevo recorte social encubierto" a las comunidades, al impedir que se amplíe la devolución del cobro de anticipos recibido en el marco de la financiación autonómica y que, en el caso de Galicia, asciende a casi 2.600 millones de euros que tendrá que reintegrar en los próximos cinco años.

Durante los últimos días, el Ejecutivo autonómico ha reclamado al Estado renegociar los plazos de la deuda para ampliarlos, lo cual también transmitió el martes en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), con el rechazo del Gobierno central. A la petición de la Comunidad gallega, se sumaron recientemente comunidades como Extremadura o Canarias, cuyo presidente visitó este miércoles Santiago de Compostela y anunció que urgirá una reunión del CPFF para abordar este tema.

"Ya se sabe nuestra opinión desde el primer momento, insistimos en que no puede haber nuevos recortes sociales y esto es, claramente, un nuevo recorte social", ha considerado el mandatario autonómico tras la reunión semanal del Consello de la Xunta, en la que ha culpado al Ejecutivo que dirige José Luis Rodríguez Zapatero de "obligar" a las comunidades autónomas a realizar estos reajustes "para solucionar sus problemas" y el "déficit público en el que esté incurriendo".

Sobre el apoyo de las demás comunidades al aplazamiento y el hecho de que no se explicitase por parte de Canarias en la reunión del CPFF —sí con posterioridad—, Núñez Feijóo ha recordado que esta cuestión "no estaba en el orden del día" y que fue apuntada por Castilla y León, que ostentaba la vicepresidencia del consejo. "Lo importante es lo que diga el Gobierno (central) y el presidente", ha subrayado el dirigente autonómico.

Así, el dirigente autonómico entiende que "al igual que extremeños, canarios y gallegos", no hay "ningún" presidente autonómico que esté dispuesto a bajar la calidad de los servicios públicos "por disciplina de partido", se atienda o no la petición que realizan las comunidades para ampliar los plazos.

El mandatario autonómico ha reiterado que "no se puede salir de la crisis e iniciar un crecimiento de la economía si a Galicia se le hurta, en plena crisis, el 5 por ciento de sus recursos" para pagar los presupuestos "irresponsables" de las anteriores legislaturas, en 2008 y 2009, con la "complicidad" del Gobierno central. Ante una "devolución irresponsable", ha agregado el presidente gallego, la Xunta reclama un "procedimiento responsable".

Otro recorte

Así, Núñez Feijóo ha relacionado el real decreto ley por el que el Gobierno realiza un recorte de 15.000 millones de euros con el que supone "un segundo recorte", es decir, los "20.000 millones que el Gobierno central impone para que las comunidades recorten" su gasto. Al respecto, advierte de que esta medida supone una "disminución" para que las autonomías "apliquen el recorte encubierto por la Hacienda estatal".

En este escenario, el mandatario autonómico explica que lo que plantea Galicia es que "no se utilice a las comunidades para hacer un segundo recorte social" y, a renglón seguido, ha garantizado que "Galicia paga lo que debe a todo el mundo", pero que "lo que no puede, es pagar en los plazos que el Gobierno necesita para solucionar sus problemas de déficit público en los que está incurriendo".

"Lo razonable es sentarse a hablar", ha reflexionado el dirigente autonómico tras lo que ha constatado que "de forma implícita o explícita" no conoce a "ninguna comunidad autónoma" que no coincida con la petición de la gallega, salvo —matiza— Madrid, porque recibirá 15 millones.

"no vamos a hacerlo"

En todo caso, el dirigente autonómico quiso lanzar un mensaje de tranquilidad al asegurar que la Xunta "no va a hacer" el "recorte social encubierto" que, según ha dicho, promueve el Gobierno central al obligar a la devolución en cinco años de los anticipos, en base al último acuerdo de financiación autonómica suscrito entre el Gobierno central y las comunidades.

"La postura es muy clara, puesto que nosotros no vamos a hacer un recorte social encubierto", ha insistido el mandatario autonómico antes de explicar que se trata de "acompasar los ritmos de devolución al mantenimiento de los servicios públicos".

Durante su intervención, en respuesta a si está dispuesto a dialogar en sede parlamentaria como pide el PSdeG, el dirigente autonómico se ha mostrado dispuesto a "plantear por qué el Gobierno (actual) tiene que pagar lo gastado por los anteriores". "A hablar del mantenimiento de una administración solvente, servicios públicos y a razonar y dialogar", ha expuesto y, dicho esto, ha considerado que "lo que hace falta" es que el Ejecutivo central "se ponga a hablar con las comunidades".

Feijóo ha defendido que su gobierno trata de ser "coherente" con su postura y recuerda que cuando los populares accedieron al Gobierno ya habían advertido un "agujero" de más de mil millones. "Cuando el agujero supera las previsiones", agrega, y llega a los 2.500 millones, es necesario "racionalidad y colaboración".