El nuevo hospital de Reus (Tarragona) no sólo estará dotado de la última tecnología médica cuando comience a prestar servicio a finales del próximo mes de septiembre, sino que ofrecerá una cara "más humana" gracias a la Fundación Curarte, que ha decorado cada una de las 24 habitaciones del área de pediatría -seis más que en las actuales instalaciones del Hospital Sant Joan— con dibujos inspirados en el pasacalle festivo de la capital del Baix Camp.

Según fuentes municipales, está previsto que las áreas de hospitalización y urgencias pediátricas estén operativas después del verano, en coincidencia con las fiestas de Misericordia.

El presidente de Sagessa (sociedad anónima municipal de servicios sanitarios), Eduard Ortiz, ha explicado que el proyecto de la Fundación Curarte genera calidez en la estancia de los niños en el hospital y sigue las recomendaciones de numerosos expertos en psicología infantil para suavizar el choque de un ingreso clínico.

Las consultas externas serán el primer servicio que ofrecerá el nuevo hospital desde inicios de septiembre, y está previsto que el traslado de toda la atención sanitaria esté cerrado en octubre, salvo algún caso aislado como los laboratorios de análisis.