El sindicato CCOO espera que la entidad financiera que finalmente se haga con CajaSur, en la subasta que abrió el Banco de España tras intervenirla el pasado mayo, "no sea un gigante con pies de barro que se caiga a los dos años", sino que cuente con un proyecto viable desde el punto de vista empresarial.

A este respecto y en rueda de prensa, el secretario general de CCOO en Córdoba, Rafael Rodríguez, explicó, respecto a la venta de CajaSur, que a su sindicato le preocupa en primer lugar "el mantenimiento del empleo" en la caja cordobesa, pero "la viabilidad del proyecto empresarial es también fundamental para CCOO".

Junto a ello, el hecho de que "se mantenga la fórmula jurídica de caja es muy importante, para que el beneficio de la entidad revierta en la sociedad, como propiedad de la sociedad que es, para que no se bancarice", a lo que añadió el sindicalista que, en este ámbito, CCOO va a "trabajar con quien llegue", dándole igual "que sea un banco u otro, aunque, si es una caja andaluza (Cajasol o Unicaja) la que se queda con CajaSur, será mejor para Córdoba, pues los órganos de dirección serán más cercanos a Córdoba y a la economía cordobesa".

En este sentido, Rodríguez precisó que la intervención y subasta de CajaSur, tras rechazar su consejo de administración la fusión con Unicaja, no es una cuestión "que afecte sólo a los trabajadores de CajaSur, sino que afecta al conjunto de la economía cordobesa, pues no se puede olvidar que más del 50 por ciento del ahorro cordobés está en CajaSur y que muchas empresas de la provincia dependen de los créditos de CajaSur".

Por eso, para el secretario general de CCOO en Córdoba, el hecho de que la cabecera de la entidad que se haga con CajaSur esté en Andalucía "siempre será más cercano que si está en Cataluña, el País Vasco o en Madrid".