Entre 7.000 y 9.000 valencianos, según la Policía Local, siguen en la noche del domingo la final del Campeonato del Mundo de Fútbol entre España y Holanda desde la Marina Juan Carlos I, donde el Ayuntamiento ha colocado una pantalla gigante para que esta 'marea roja' traslade sus ánimos a la escuadra de Vicente del Bosque, en especial al ex valencianista David Villa, uno de los más aclamados de la noche.

En el resto de la ciudad, calzadas desiertas, autobuses vacíos y terrazas a rebosar completan el panorama de una Valencia tomada por el rojo y amarillo de la enseña nacional. No en vano, muchos conductores de autobuses urbanos de servicio han aprovechado las paradas reglamentarias para acercarse a los bares del centro y "aliviar" los rigores de trabajar en un día que puede ser histórico para el fútbol español.

Amantes y expertos del fútbol comparten hoy tema de debate con gente menos experta, pero que no por ello pone menos entusiasmo en animar a 'La Roja'.

Otro de los 'puntos calientes', además del puerto y el centro es la Plaza de la Afición, en las inmediaciones de Mestalla, donde centenares de aficionados se concentran alrededor del bar de Manolo 'el del Bombo'.

Por el momento, a la espera de ver qué depara la prórroga, las banderas y las vuvuzelas continúan sonando en las inmediaciones de la Plaza del Ayuntamiento, en la que una veintena de vallas adelanta la eventual fiesta que podría celebrarse de resultar España campeona del mundo esta noche.

Según fuentes de la Policía Local, por el momento no se han registrado incidentes en el macroencuentro del puerto, en el que hay desplegados cerca de un centenar de agentes.