La Policía Local de Tarragona ha establecido un dispositivo especial de seguridad para el XXI Concurso Internacional de Fuegos Artificiales de Tarragona, que empieza mañana, y que consiste en 75 puntos de control, 11 más que el año pasado.

Estará formado por 45 agentes de la Policía Local, 17 voluntarios de Protección Civil, nueve policías portuarios y cuatro Mossos d'Esquadra. También estarán en alerta los bomberos y las ambulancias de Cruz Roja, ha informado este lunes el Ayuntamiento en un comunicado.

Este dispositivo se pondrá en marcha mañana, a partir de las 19 horas, hasta la finalización del acto y estará vigente hasta la evacuación de las zonas afectadas. Los agentes de la Guardia Urbana refuerzan especialmente la Vía Augusta y el entorno del Paseo de Rafael Casanovas.

Se adoptarán medidas excepcionales de ordenación y regulación de la circulación, con el fin de aumentar la capacidad de las arterias principales de la ciudad y mejorar la movilidad de los miles de espectadores que se concentran.

Para ello, se establecerán sentidos únicos de circulación en varias vías principales, se restringirá la circulación en algunas calles, se cerrarán al tráfico de vehículos vías que serán ocupadas por peatones, habrá carriles de emergencia y acceso al Hospital de Santa Tecla y vías de evacuación de la zona de seguridad. El cruce de Renfe en la plaza dels Carros y el vial Bryant permanecerán cortados.

Al finalizar los fuegos, todos los agentes integrarán un cordón regulador del tráfico en las intersecciones más importantes para dar fluidez a la circulación desde la vía Augusta hasta la plaza Imperial Tarraco. Habrá agentes hasta la plaza Imperial Tarraco para dar prioridad al tráfico procedente del eje vía Augusta-Rambla Vella-Estanislao Figueres.

La distancia mínima de seguridad durante el espectáculo es de 300 metros. Los artefactos con calibres a partir de 250 milímetros se situarán en la parte más alejada del público orientados hacia el espacio aéreo y hacia el mar.