El PSPV de la Pobla de Vallbona (Valencia) ha denunciado que el arquitecto municipal cobrará este año un sueldo superior al de un ministro del actual Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, ya que sus emolumentos están fijados en un total de 72.400 euros anuales —según se refleja en el presupuesto de 2010— frente a los 68.900 euros que perciben en estos momentos los ministros.

Según ha indicado este partido en un comunicado, las retribuciones de este funcionario han aumentado un 55 por ciento desde la entrada de la actual alcaldesa, Mari Carmen Contelles (PP), en el gobierno de la Pobla.

Con anterioridad, el arquitecto percibía ya 47.000 euros por acudir tres días a la semana a su puesto de trabajo. Sin embargo, Contelles aprobó en agosto de 2007 un aumento del 40 por ciento en el sueldo del funcionario, que pasó a percibir 66.000 euros que, en el corto espacio de tiempo de tres años, se han convertido en los actuales 72.400 euros anuales. Por tanto, los ingresos del arquitecto municipal se reparten en 14 pagas de 5.142 euros mensuales.

El PSPV de la Pobla considera una "indecencia" y una "aberración" que en una época de crisis un funcionario del ayuntamiento "cobre más que un ministro del Gobierno, pese a que la actividad urbanística ha caído más de un 50 por ciento en el último año y el descenso en los ingresos municipales han generado un déficit de 1,4 millones de euros en el presupuesto de 2009".

Por tanto, el grupo socialista ha reclamado que los altos sueldos de algunos empleados "se adapten a la situación financiera del Ayuntamiento, ya que la deuda municipal reconocida supera los 12 millones de euros", ha criticado.

Al respecto, el portavoz del PSPV, Jaume Cortina, considera que la reducción de los salarios más elevados del ayuntamiento "es una necesidad que se debe plantear seriamente el equipo de gobierno, ya que estamos en un periodo de restricciones económicas y no se puede concebir que un funcionario perciba 72.400 euros anuales mientras que decenas de familias de la Pobla tienen verdaderos problemas para llegar a final de mes".

El PSPV ya denunció en marzo de 1996 la decisión del Ayuntamiento de la Pobla de convertir en fijas las plazas del arquitecto técnico, el ingeniero municipal y el aparejador "sin ningún tipo de prueba ni oposición y con los preceptivos informes en contra del secretario municipal", ha recordado el partido.