La Junta de Castilla y León realizó 22.802 inspecciones de Consumo en la Comunidad a lo largo de 2009, de las que casi 4.000 resultaron positivas, es decir, detectaron alguna infracción que pudo llevar consigo algún tipo de advertencia o incluso la apertura de un expediente.

En concreto, según informaron a Europa Press fuentes de la Consejería de Interior y Justicia, el número de inspecciones positivas ascendió a 3.996, mientras que el de positivas fue de 17.659. Además, se realizaron 1.147 tomas de muestras.

Del total de inspecciones, la mayor parte, un total de 19.647 se realizaron sobre productos industriales y la mayor parte de ellas, 16.262 resultaron negativas, mientras que 2.670 fueron positivas. Además, se tomaron 715 muestras.

En este mismo sector, el número de expedientes incoados ascendió durante el pasado año a 238 entre los productos industriales. La mayor parte de ellos, 106, estuvieron motivados por normalización y condiciones de venta, mientras que la adulteración y los fraudes en la calidad supusieron 56 expedientes, los precios 42, las transacciones comerciales 33 y el fraude de peso uno.

Por lo que se refiere a los productos alimenticios, sector sobre el que se realizaron 1.967 inspecciones —432 fueron tomas de muestras—, 628 resultaron positivas y 907 negativas. En este apartado, el número de expedientes incoados fue de 51, 20 de ellos por adulteración y fraudes en la calidad, 14 motivados por los precios, una docena por normalización y condiciones de venta, cuatro por fraude en el peso y una por transacciones comerciales.

En el sector servicios el número de inspecciones ascendió a 1.188, de las que 698 fueron positivas y 490 negativas. Por lo que se refiere a los expedientes incoados en esta materia, que sumaron 431, la mayor parte de ellos, un total de 193, se debió a normalización y condiciones de venta, mientras que la adulteración y los fraudes de calidad se tradujeron en 88 expedientes y los precios en 57; 87 se abrieron por precios, 58 por transacciones comerciales y cinco por fraude en el peso.

Las 22.802 inspecciones se realizaron en las nueve provincias de la Comunidad, aunque destacan las 9.234 de Valladolid, seguida de las 3.683 de León y las 2.697 de Zamora. Por detrás se situaron las de Ávila (1.852), Segovia (1.528), Salamanca (1.271), Burgos (1.093), Palencia (795) y Soria (649).