Takeshi Kitano

El anuncio la aparición de Takeshi Kitano en la versión de imagen real de Ghost in the Shell, su primer papel en un filme occidental en casi veinte años, vuelve a poner en el punto de mira a uno de los cineastas, guionistas y actores más relevantes del cine asiático de las últimas décadas, al hombre que durante un tiempo rivalizó con el mismísimo Quentin Tarantino como renovador del noir contemporáneo.

En los últimos años Kitano ha mantenido un perfil bajo que nada tiene que ver con aquella época de actividad frenética que arrancó con aquella primera película como director y protagonista -Violent Cop, 1989- y que se mantuvo hasta el arranque del nuevo siglo con su aportación al cine de samurais -Zatoichi, 2003-. Desde entonces una par de extrañas comedias -Takeshis (2005) y Aquiles y la tortuga (2008)-, dos intentos de retomar el cine de yakuzas con la saga Outrage (2010 y 2012) y un amago de intentar casar ambos mundos con la comedia mafiosa Ryuzo and his Seven Henchmen (2015).

El caso es quea Kitano y sus películas más destacada los vinculamos con los primeros años del dvd y la popularización del cine asiático vía festivales y home video. Por eso, porque las ediciones de sus películas más destacadas tuvieron lugar durante el cambio de siglo y en los últimos tiempos su popularidad ha decrecido de forma notable, cintas como Hana-Bi (1997) o El verano de Kikujiro (1999) que ahora recupera Mediatres pedían a gritos una reedición en blu ray que esperemos pronto llegue a títulos igualmente relevantes como Dolls (2002), Brother (2000), Sonatine (1993) o Escenas en el mar (1991).

Mediatres además ha aplicado su habitual cuidado a la hora de plantear estas reediciones que llegan con versión remasterizada, libretos de 20 páginas con textos del Subdirector de Sitges Mike Hostench y un making of para cada película (ambos en VOSE): en el caso de Hana -Bi de 15 minutos, y en el de El verano de Kikujiro que se va hasta los 93 minutos.