Tanto al tripartito (PSC, ERC e ICV) como a CiU no les ha gustado nada el texto alternativo que les ha enviado el Gobierno y que modifica sustancialmente el que diseñó Cataluña, sobre todo en el apartado de financiación autonómica. A pesar de estas diferencias, el acuerdo tendrá que llegar pronto. El Congreso amplió ayer por tercera vez el plazo de presentación de enmiendas al proyecto de ley, situando el nuevo límite en el 27 de diciembre.

El PSC ha considerado «inaceptable» el texto presentado por el Gobierno, mientras que ERC e ICV se han mostrado «muy preocupados por el recorte importante» que ha sufrido el texto.

«Hace falta un milagro»

El presidente de CiU, Artur Mas, señaló que la propuesta de Zapatero «no hay por donde cogerla» y aseguró que «o se produce un milagro o la aprobación del nuevo Estatuto no se arregla». CiU pidió ayer más tiempo de negociación, «ya que el acuerdo es imposible antes del día 27».

Para echar más leña el fuego, el portavoz del PP, Eduardo Zaplana, acusó ayer al Gobierno de negociar «a espaldas» de los ciudadanos. «El presidente ha perdido mucha popularidad por este asunto sin que se sepa de qué hablan, ya que, si se conociera, el escándalo sería mayúsculo», señaló.

El texto del Gobierno no define a Cataluña como nación y rechaza que  tenga en exclusividad   18 competencias, que pasarían a ser «compartidas».

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