La Policía Local de Mahón realizó durante el pasado 2009 una media de cinco actuaciones diarias relacionadas con los servicios a la comunidad y la mediación, unas actividades de carácter más asistencial que de vigilancia o control del tráfico y que por primera vez el Ayuntamiento ha reflejado en la memoria anual del Cuerpo.

El teniente de alcalde de Movilidad, Prevención y Seguridad Ciudadana, Mateu Llabrés, ha presentado hoy, junto al jefe de la Policía Local, Rafael Le Senne, el balance estadístico del pasado año, relativo a esta parte social de las labores policiales, en el que destacan los 887 servicios comunitarios -entre los que se incluyen la ayuda a personas mayores que sufren caídas en su domicilio o en la vía pública, la colaboración en la detección de faltas y delitos, o los percances relacionados con animales e intoxicaciones etílicas-, y las 988 actuaciones de mediación relacionadas, sobre todo, con los conflictos y molestias vecinales debido a exceso de ruido (501 del total).

El concejal Mateu Llabrés ha destacado esta labor de la Policía Local, que va en aumento y que se debe, en su opinión, a la creciente despersonalización de las relaciones en una ciudad en la que "ya no nos conocemos todos" por lo que "pequeñas disputas que hace años se resolvían hablando entre vecinos, ahora se resuelven con una llamada directa a la Policía, porque una parte de los ciudadanos ni siquiera intenta hablar".

Por su parte, el responsable de la Policía Local, Rafael Le Senne, ha señalado que los agentes cubren una serie de servicios que son imposibles de ofrecer y mantener por el Ayuntamiento para casos muy específicos y puntuales, y que el policía "hace de mediador porque no hay otro que lo haga y porque puede hacerlo con objetividad".

Las actuaciones más habituales son las caídas de gente mayor, las discusiones por ruidos entre vecinos, y las quejas por ruidos y molestias de obras, aunque también se dan algunos servicios extraordinarios, como fue el caso de la aparición de una serpiente venenosa en el patio de una vivienda.

Situaciones en las que los ciudadanos recurren siempre en primer lugar a la Policía Local, que según ha explicado Llabrés, es el Cuerpo que presenta una mayor capacidad de respuesta en este municipio menorquín, entre 5 y 7 minutos. DENUNCIAS

Las actuaciones policiales no siempre derivan en denuncias administrativas, por lo que el número de expedientes abiertos es bastante inferior al de los servicios realizados por la Policía Local. En total en 2009 se tramitaron 210 denuncias y 30 expedientes de protección acústica, así como 31 procedimientos relativos al cumplimiento de la Ley 1/1992 de Seguridad Ciudadana.

En este apartado, la memoria distingue las infracciones de la ordenanzas municipales, con 65 denuncias por el consumo de alcohol en la vía pública -el conocido popularmente como 'botellón'-, que se concentran en el mes de agosto (46 denuncias) y afectan en más de un 50 por ciento de los casos a menores de 22 años (39 denuncias). Destacan asimismo las denuncias relacionadas con la tenencia de animales, en concreto perros, que suman 40 expedientes.

Por otro lado, un 34 por ciento de los expedientes tramitados en relación a la protección acústica se refieren a viviendas y locales, un 17 por ciento al comportamiento ciudadano y un 13 por ciento a infracciones cometidas por establecimientos. En cuanto a las infracciones de la Ley 1/1992, cuya competencia corresponde a la Policía Nacional, el trabajo de colaboración de la Policía Local se ha centrado en la detección de tenencia de estupefacientes (82 por ciento de los servicios).

El Ayuntamiento, a través de la Policía Local, asume competencias impropias o "del Estado o que no son de nadie, en más de un 50 por ciento" de estas actuaciones asistenciales, como ha señalado el responsable del servicio, Rafael Le Senne, quien sin embargo ha subrayado la necesidad de llevar adelante este "cometido social".