La Consejería de Educación, Formación y Empleo registró 526 conductas "gravemente perjudiciales" y contrarias a la convivencia escolar en los centros escolares de la Región de Murcia durante el curso académico 2008-2009. Además, la Consejería abrió 36 expedientes de cambio de centro —dos menos que el curso anterior— y ordenó otros cuatro expedientes por casos de acoso escolar, lo que representa uno menos que en el curso 2007-2008.

El consejero del ramo, Constantino Sotoca, tras presidir el pleno del Observatorio para la Convivencia Escolar, ofreció en rueda de prensa estos datos contenidos en el Informe Anual de Convivencia en los centros de la Región correspondientes al curso 2008-2009, y los resultados del estudio estatal en el que participó la Consejería para conocer la valoración de los profesores sobre la calidad global de la convivencia.

En cuanto a las 526 conductas perjudiciales, que engloban cualquier agresión física o moral, las amenazas o los casos de indisciplina grave, el consejero afirmó que representan una incidencia "muy baja", teniendo en cuenta el número total de alumnos matriculados que ese periodo alcanzó los 198.084 alumnos, y que supone un 0,26 por ciento, un dato muy similar a los del curso 2007-2008 en el que se registraron 499 conductas de este tipo, con un porcentaje del 0,25 por ciento.

El consejero matizó que el 79,4 por ciento de estas conductas contrarias a la convivencia escolar se produjo en Secundaria, fundamentalmente en primero y segundo de la ESO, mientras que la incidencia más baja se dio en las etapas de enseñanza Primaria con un 8,56 por ciento del total. Por sexos, el 82 por ciento eran niños y el resto niñas.

Asimismo, Sotoca aseguró que la Consejería ha hecho un seguimiento específico de los expedientes por acoso escolar durante el curso escolar pasado y, aunque las cuatro investigaciones abiertas por este motivo representan una cifra "muy baja", dijo que es un tema que "sigue preocupando a la Consejería".

En estos casos, Sotoca dijo que "cuesta distinguir y detectar los casos de acoso escolar de otras figuras", y señaló que "es posible que el niño no perciba esa situación de acoso y se esté produciendo y viceversa". Por eso indicó que es "necesario profundizar en ese tema porque preocupa a la comunidad educativa".

En cuanto a las medidas correctoras más aplicadas en los centros, el consejero subrayó la realización de tareas educadoras para el alumno, fuera del horario escolar y dirigidas a reparar el daño causado en las instalaciones, en el material del centro o el daño a otros miembros de la comunidad escolar.

Sotoca subrayó que "se trata de una medida eminentemente educativa, que se aplicó en el 36 por ciento de los casos, y que está en consonancia con objetivos formativos y no exclusivamente sancionadores".

Además, destacó que la mayoría son por conductas "disruptivas, es decir, por reiteración en las conductas contrarias a las normas de convivencia general, y que "durante el curso escolar pasado apenas se aplicaron expedientes de cambio de centro, que es una de las medidas correctoras más rigurosas".

En este sentido, Sotoca aseguró que el Informe Anual de la Convivencia refleja un buen clima escolar en las aulas, "con unos indicadores muy similares a los del curso escolar pasado, que confirman una tendencia uniforme desde que los centros escolares empezaron a aplicar los Planes de Convivencia".

Estudio nacional

Respecto a los datos del estudio estatal en el que participó la Consejería, Sotoca explicó que recogía la opinión entre una muestra de 250 profesores de Secundaria, escogidos al azar, quienes tuvieron que valorar entre otras, la calidad global de la convivencia en el centro, la realización personal del profesorado, la relación y la influencia del docente sobre el alumno, o la relación y la comunicación con las familias.

Los resultados del estudio muestran que el profesorado de la Región de Murcia realiza una evaluación positiva del nivel global de convivencia en sus centros, con una puntuación de 7 sobre 10, por encima de la puntuación nacional que se sitúa en 6 sobre 10. Además, dijo que entre los factores más valorados por el profesorado destacan su sentimiento de pertenencia al centro y el grado de realización personal que sienten por el hecho de ser docentes, con una puntuación de 8 y 7, respectivamente, sobre 10.

En este último apartado, los docentes valoraron su deseo de trabajar como profesor, su consideración acerca del trabajo que realizan, la influencia positiva de su trabajo sobre los alumnos, su capacidad para crear con facilidad un clima agradable, o su disposición para mejorar el clima de convivencia escolar.

El consejero explicó que la valoración de los docentes de la Región de Murcia "supera en todos los factores e items la media nacional hecha por los docentes de otras comunidades autónomas". Por ello, se felicitó por "la profunda implantación de los planes de convivencia en los centros docentes de la Región de Murcia".

Propuestas de mejora

El titular de Educación recordó "el esfuerzo del Gobierno regional para mejorar el clima de convivencia escolar que se ha materializado en la puesta en marcha de diferentes medidas, como el Plan Regional de Convivencia, las Comisiones de Convivencia, los planes de cada centro, o en programas como Juez de Paz Educativo, Educando en Justicia, el Plan Director o Educar en valores.

Sotoca subrayó la eficacia de todas estas medidas pero anunció la puesta en marcha de otras propuestas de mejorar en base a los datos recogidos por el Informe Anual, y que "van a permitir seguir avanzando en esta materia de cara al próximo curso escolar".

Así, destacó la puesta en marcha de actuaciones concretas que eviten el incremento de conductas disruptivas, con el apoyo de los equipos de orientación, profesores y padres. Además, se desarrollará un protocolo para que el profesorado intervenga de una forma similar ante este tipo de conductas, que son las que más preocupan a los docentes por cuanto impiden el desarrollo normal de las clases.

Para facilitar la actuación de los profesores ante la disrupción en el aula, anunció acciones formativas dirigidas específicamente a este fenómeno, con el objetivo de dotar a los docentes de herramientas y habilidades que les permitan realizar una gestión eficaz del aula, conocer más al alumnado y su interacción e integración en el grupo.

Además, la Consejería pondrá en marcha medidas de asesoramiento e información dirigidas a los padres para conseguir una mayor implicación en los centros y que puedan afrontar situaciones conflictivas, y para generalizar desde casa, las conductas que se practican en el aula. Sotoca destacó la elaboración de material explicativo sobre procedimientos que permitan al profesorado prevenir posibles situaciones de acoso escolar.

En el marco del Plan Regional de Convivencia, se pondrán en marcha otras medidas como la elaboración de un Manual de Orientación dirigido a las familias, en materia de convivencia escolar, el desarrollo de protocolos de actuación ante conflictos a partir de los planes de convivencia de los centros y otras actividades para difundir las buenas prácticas de los centros.

Al ser preguntado por la posibilidad de que la Región de Murcia cuente con una Ley de Autoridad del Profesor como la de la Comunidad de Madrid, Sotoca explicó que su Consejería "va a seguir profundizando en su elaboración", y que se está tramitando un convenio con la Fiscalía semejante al que en su momento negoció la Consejería de Sanidad para que se dote de esa autoridad en aspectos legales en aquellos casos que lleguen a los juzgados de agresiones.