Las industrias lácteas prevén suscribir hasta marzo de 2011 unos 4.000 contratos homologados con ganaderos, lo que significa que "más" del "cuarenta por ciento" de la cuota española estará bajo este tipo de acuerdo, según informó hoy a Europa Press el técnico de la sección de ganadería de la Cooperativas Agroalimentarias, Fernando de Antonio.

Al término de la comisión de seguimiento del Plan Estratégico del sector lácteo español, 'Horizonte 2015', que contó con la presencia del secretario general de Xóvenes Agricultores de Galicia, Francisco Bello, representantes del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM), industrias lácteas y de las principales cadenas de distribución, Fernando de Antonio explicó que según la tendencia de crecimiento actual se espera que en un año se dupliquen los contratos.

En lo que va de año, las industrias lácteas suscribieron 806 contratos con ganaderos, de los que más de la mitad se firmaron en Galicia. No obstante, el total de documentos registrados desde su implantación, hace dos años, asciende a 3.190, aunque todos los contratos homologados que existen en España suman 662.000 toneladas de leche.

"La tendencia que tenemos es que ese 20 por ciento se pueda convertir en una cantidad que pueda incluso duplicarse gracias a los datos que hemos recogido hasta el 17 de junio", señaló, para reiterar que para el 31 de marzo de 2011 se podrá tener, "perfectamente", más del 40 por ciento de la cuota.

Xóvenes agricultores de galicia por su parte, el secretario general de Xóvenes Agricultores de Galicia consideró "muy importante" que el grupo de alto nivel de la UE para el sector lácteo haya deparado unas conclusiones acordes con lo marcado en España hace más de un año en el Plan Lácteo —abogan por permitir a los productores lácteos la negociación colectiva del precio de la leche—.

En este sentido, aseguró que el acuerdo "histórico" alcanzado el año pasado ha permitido que ya se hayan "empezado a generalizar en el sector los contratos homologados", aunque consideró que queda "mucho por avanzar" en este asunto.

Así, respecto a las líneas de trabajo que se marcan desde Bruselas, Bello explicó que uno de los factores más importantes es que "los contratos" entre la industria y el ganadero "puedan ser obligatorios", de modo que ésta sea "la que se lo ofrezca al ganadero" y éste decida si las condiciones le son "favorables".

"Quedan muchos deberes" por hacer "en los próximos meses", añadió, puesto que "la Comisión Europea está ya redactando las normas en función de lo que han acordado los expertos". "Lo que definitivamente falta es que toda esta cuestión se traduzca al precio que percibe realmente el ganadero", matizó en declaraciones a Europa Press.

No obstante, valoró el paso adelante que significa la posibilidad de "cambiar las normas de competencia" de tal forma que, mediante la derogación de las mismas, los ganaderos puedan tener "el poder de la negociación colectiva, que hasta ahora siempre estaba bajo la lupa de las autoridades de competencia".

Negociar "sin la presión de los focos y normas"

"Ahora, de una vez por todas, los ganaderos podrán sentarse con las industrias sin los focos, sin las presiones de las normas, de las leyes, que iban en su contra, porque, de una vez por todas, se tienen las herramientas para poder trabajar en positivo y poder negociar con las industrias los precios", argumentó.

Preguntado acerca de la receptividad mostrada por la industria ante las nuevas medidas que se prevén, Bello indicó que "siempre les cuesta mucho todo lo que sea dar pasos en esa dirección" y recordó que, mientras la industria hizo el año pasado "cifras récord de beneficios", los ganaderos "han tenido el peor año de su historia".

"A ellos les va bien que la situación siga así, pero nuestra obligación es forzar con el mecanismo que tenemos a nuestro alcance que las industrias entren ya de una vez por todas por el aro de la negociación colectiva", agregó.

En otro sentido, consideró que la labor del MARM "no ha sido mala", aunque "probablemente se pudiera hacer más". Si bien, remarcó que se está avanzando en "la dirección correcta".