Según ha informado la Delegación del Gobierno en Melilla a través de una nota de prensa, los concentrados repartieron octavillas a los peatones que se disponían a entrar a Marruecos y, poco después, impidieron la entrada, de forma aleatoria, a algunos vehículos que pretendían cruzar la frontera.

En el transcurso de la concentración, que ha comenzado alrededor de las 12,30 horas, uno de los individuos, "muy alterado, lanzó expresiones contra España". Tuvo que ser reducido por la policía marroquí.

La protesta ha concluido casi una hora después sin que haya sido necesario cerrar la verja del puesto fronterizo. Tampoco hay que resaltar ningún tipo de daño personal o material.

Éste es el segundo incidente en la frontera de Beni-Enzar que ha tenido lugar en una semana. El último se produjo el pasado lunes, cuando el tráfico de vehículos se vio interrumpido a causa de una protesta en la zona marroquí por un grupo de unas 40 personas que habían ocupado la calzada.